Las bancadas de los partidos Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD) y del Trabajo (PT) responsabilizaron a Beatriz Paredes Rangel, dirigente priísta, de haber propuesto al gobierno federal y al blanquiazul intercambiar el aumento de impuestos por el compromiso de no concretar una alianza electoral entre la izquierda y la derecha en el estado de México para los comicios de julio de 2011.

El partido del sol azteca anunció que presentará solicitudes de desafuero contra los diputados Paredes y César Nava con objeto de fincarles juicio político por el daño generado a la sociedad mexicana con el incremento de impuestos convenido el pasado fin de año.

Con dureza, el PAN la emprendió contra la presidenta nacional del PRI, al señalar que presionó para alcanzar el acuerdo que ha generado escándalo; no obstante, también descalificó al presidente de su partido por haber intervenido en un acuerdo notoriamente inconfesable.

Leticia Quezada (PRD) calificó el acuerdo por escrito entre PRI y PAN de alianza perversa a costa de los intereses de millones de mexicanos.

Vamos a revisar la cuestión jurídica, porque, inclusive, pudiéramos hablar de juicios políticos. Ellos pusieron en riesgo la economía del país, se repartieron a toda luz el Presupuesto de Egresos de la Federación. Vamos a revisar si jurídicamente es procedente aplicarles a los dos un juicio político por su condición de diputados y como presidentes de sus partidos políticos.

–¿Beatriz Paredes deberá explicar su grado de responsabilidad en el escándalo?

–Tienen que dar una explicación ambos partidos de manera clara y decirnos qué sucedió realmente. Uno a otro se echan la pelota, a ver quién sale más raspado. Hubo una cuestión clara que afectó a los ciudadanos. El fondo es esta crisis económica, el alza de la gasolina, los impuestos que se acordaron.

Con otra visión, Roberto Gil Zuarth, vicecoordinador del PAN, no avaló el compromiso suscrito por Nava: el presidente del partido ha aclarado su participación en ese acuerdo, y también debo decir, en segundo lugar, que el grupo negociador de Acción Nacional en el paquete fiscal, tanto en la Ley de Ingresos como en el Presupuesto de Egresos, nunca tuvo conocimiento de la existencia de ese acuerdo.

–Entonces, ¿los engañaron?

–Nosotros no fuimos parte de ese acuerdo. Deben explicarlo quienes lo suscribieron, porque ahí hay varias firmas, no solamente las de Acción Nacional, sino de otros partidos.

–¿Traicionados por Paredes?

–Sólo pueden sentirse traicionados o conmocionados por la noticia quienes habían suscrito algún pacto de confidencialidad. Los panistas, los diputados del PAN, no fueron parte de ese acuerdo.

–¿Paredes manipuló a Nava?

–No. Lo que digo es que ahí hay todo un proceso de construcción de ese acuerdo, cuál fue la posición de un grupo de oposición (PRI) que llevó a la solicitud o a poner en la mesa ese acuerdo. Si hacemos esa reflexión, tendríamos que concluir que hay algunas intenciones de no colaborar con lo que está reclamando el país.

–¿El PAN todavía tiene cara para llamar al electorado a seguir votando en las alianzas?

–Acción Nacional es más fuerte y más grande que esta coyuntura; es más fuerte y más grande que este episodio y esta anécdota.

Por el contrario, Jorge Carlos Ramírez Marín, vicecoordinador del PRI, minimizó la participación política de Nava en el escándalo. Me parece que ya es irrelevante el decir si (el presidente del PAN) lo hubiera firmado o no. Creo que la confianza en términos políticos al dirigente de ese partido ha sufrido mermas considerables, y no de ahora ni por este asunto de los papeles ni de las alianzas.

–¿Se negoció la Ley de Ingresos o no?

–Quiero ser enfático: las negociaciones que se hicieron aquí con la Secretaría de Hacienda, relacionadas todas con el paquete fiscal, fueron exclusivamente legislativas. Lo demás corresponde al ámbito de los partidos.

–¿Usted sabía que se firmó un acuerdo de esta naturaleza?

–No, no lo sabía.

–¿Qué genera César Nava al PRI? –se le inquirió.

–Nava debe ser irrelevante para el PRI (...) En términos de circunstancia política y de tenerle confianza o no, creo que cada uno que se siente a negociar con César Nava alguna cuestión, ahora deberá tomar en cuenta qué antecedentes hay.

Laura Itzel Castillo Juárez (PT) señaló que se ha demostrado la existencia del PRIAN: esto es algo más que sucio. Realmente lo que refleja es que los intereses de estos partidos están muy por encima de tener una visión de carácter social y de apoyar a la población directamente.