Un grupo de ocho connacionales procedentes de Chile arribó ayer domingo a la ciudad de México, con lo que ya suman 100 los mexicanos repatriados tras el sismo del 27 de febrero. A su arribo, señalaron que aún hay caos en esa nación, sobre todo por los saqueos y porque no se han restablecido servicios básicos, como luz y agua en muchas zonas.

Sostuvieron que también se está presentando un fenómeno de hiperinflación por el encarecimiento ficticio de productos, señalaron, y que la mayor parte de ellos requirió el apoyo de la representación mexicana en Santiago de Chile para poder regresar, ya que en el sismo perdieron documentos, dinero y sus pertenencias.

Los repatriados son: Samanta García, Sergio Suárez, Marisol Reyes, Gabriela Ledezma, acompañada de su hija Miriam Lagos; Héctor González, Edith Pereda y Nancy León. Ellos conformaron el cuarto grupo de connacionales repatriados, el cual fue recibido por funcionarios de la Dirección General de Protección a Mexicanos en el Exterior de la Cancillería.

En entrevistas por separado al bajar del vuelo 011 de Aeroméxico, comentaron sus casos particulares y coincidieron en señalar que la situación en Chile es difícil: hay problemas porque todavía no hay servicio de agua regular en toda la nación, también escasea el abasto de gas y hay fallas en el servicio de energía eléctrica. Todos señalaron también que el mayor problema que están viviendo los chilenos son los saqueos, que no sólo se da en comercios, sino también en casas particulares.

Chilenos radicados en México entonan el Himno NacionalFoto Marco Peláez

Los corresponsales de Notimex en Santiago y Concepción señalaron que padres de estudiantes mexicanos reportaron desde México a la embajada de nuestro país en Chile que sus hijos eran parte de un grupo de 25 estudiantes que llegaron a ese país en un intercambio y que estaban pasando severas dificultades por la falta de comida, agua y seguridad.

Tras la denuncia, el pasado lunes un funcionario de la embajada se trasladó a Concepción a fin de localizar y contactar a los estudiantes, lo que se realizó en forma paulatina, ya que hay serias dificultades en el servicio de telecomunicaciones, agravadas porque en esa ciudad había grupos que salían a saquear comercios y residencias, lo que sólo pudo detenerse hasta que el gobierno de Michelle Bachelet decretó el estado de excepción.

Notimex reportó que la representación diplomática en ese país ya instaló un centro de asistencia para los ciudadanos mexicanos en la ciudad de Concepción. Dicho centro está a cargo del agregado militar adjunto de la embajada mexicana, coronel de la Fuerza Aérea, Javier Eduardo Alvarado, y fue instalado en El Rancho, sede de la congregación de Schoenstatt, cercana a la Universidad de Concepción.

Se estima que al menos 50 mexicanos se encontraban en esta ciudad al momento del terremoto; de éstos, la mitad fueron enviados a Santiago y algunos ya están de regreso en México, mientras otro tanto fue reubicado en viviendas universitarias de la capital de Chile; la mayoría ha recibido asistencia legal y financiera, según confirmó la cancillería.