Buenos Aires, 11 de marzo. En un multitudinario acto celebrado en la cancha de Ferrocarril Oeste, el ex presidente y actual diputado Néstor Kirchner exhortó a trabajadores de la Confederación General del Trabajo, movimientos sociales, políticos y juveniles a rescatar el significado de aquellos días difíciles, reivindicó los logros democráticos de los últimos años y se refirió a la actual presidenta Cristina Fernández –su esposa– como la compañera coraje por su entereza para enfrentar duros e injustos momentos políticos.

El acto se consideró un fuerte respaldo a la mandataria, que en los últimos días enfrentó una inusitada actividad opositora en el Senado, donde una asombrosa alianza coyuntural impuso –con irregularidades– el control de comisiones sin respeto a la minoría que regía la conducta senatorial.

Lo anterior coincidió con el segundo fracaso en horas de esa misma oposición en el Senado, que no pudo lograr quórum para rechazar la designación de la economista Mercedes Marcó del Pont como presidenta en comisión del Banco Central.

Roxana Latorre, senadora nacional opositora por Santa Fe, advirtió sobre un espíritu golpista que se respira en el Parlamento para tratar de que la presidenta Cristina Fernández se vaya antes de terminar su mandato y dijo que votará en favor del pliego de Marcó del Pont, al considerar que se está cometiendo una injusticia con la economista en el Senado.

Latorre, que formó un bloque propio al alejarse del justicialismo disidente que encabeza en su provincia el ex gobernador Carlos Reutemann, sostuvo que no es la única en la oposición que no acordaba con algunas actitudes de sectores contrarios al gobierno.

En las últimas horas dirigentes opositores protagonizaron duros enfrentamientos internos que revelaron la fragilidad de una alianza que no presentó alternativas ante las medidas gubernamentales.

No me he pasado al kirchnerismo, como algunos intentan hacer aparecer; formé un bloque independiente y repito que la presidenta tiene mandato hasta 2011, dijo Latorre, quien votó varias veces contra el gobierno, lo que le costó amenazas de sectores derechistas.

Esta actitud obligó a la oposición a dar marcha atrás con sus intenciones de rechazar el pliego, después de haber escuchado a Marcó del Pont con hostilidad y advertirle que dijera lo que dijera tenían ya una posición tomada.

Marcó del Pont, designada por la presidenta en comisión al quedar acéfala la presidencia del Banco Central, dijo sentirse defraudada por la falta de respeto de quienes debieron escucharla y hacerles preguntas antes de intentar rechazarla sin argumentos.

En su presentación entregó todos los papeles necesarios para demostrar que se actuó en la más absoluta legalidad; hicimos lo que teníamos que hacer y de no haberlo hecho hubiéramos sido factibles del mismo desenlace que el anterior titular (del Banco Central, Martín Redrado).

Sostuvo que se decidió avanzar paso a paso por todos los procedimientos necesarios para dar cumplimiento a esta norma (sobre el uso de una parte de las reservas); el Banco Central pidió asesoría jurídica para contar con todos los dictámenes que hicieran falta para que el directorio pudiera tomar una decisión y recordó que el dictamen del procurador del Tesoro fue muy claro, y señaló los incumplimientos del anterior presidente del Banco Central.

En su introducción afirmó que desde hace 25 años milita en el área de la economía en favor del desarrollo y enfrentada al pensamiento liberal, y afirmó que como diputada trabajó para fortalecer las Pymes y desde el Banco Nación intenté consolidar el liderazgo de la banca pública.

Históricamente, el Banco Central siempre estuvo al margen de los debates económicos del país, por eso me parece que ésta es una buena oportunidad para que la entidad ocupe un lugar estratégico. Nos debemos esta discusión, tanto para este gobierno como para los que vendrán, argumentó

Por su parte, en el acto político entre cánticos y aplausos Kirchner destacó el trabajo de su esposa para producir cambios y mencionó las severas dificultades ante verdaderas máquinas de impedir, que pusieron trabas hasta para los más importantes logros sociales, además de que llamó a la racionalidad política.