Niega el consejero Baños versiones que hablaban de miles de despidos
en el instituto
Las medidas de austeridad no han sido suficientes para asumir la reducción de recursos, dice
Lunes 15 de marzo de 2010, p. 10
El recorte de personal que ha iniciado el Instituto Federal Electoral (IFE) no será masivo
y se circunscribirá a alrededor de 120 plazas, mismas que se eliminarán ante la imposibilidad de absorber el ajuste de 600 millones de pesos a su propuesta original de presupuesto que le decretó la Cámara de Diputados. Las medidas de austeridad decretadas –se justificó el organismo– no han sido suficientes para poder asumir la reducción de recursos.
Al referirse a la medida, el consejero Marco Antonio Baños dijo que es categóricamente
falso que la eliminación de plazas sea masiva y que vaya a afectar a centenares trabajadores o incluso más de mil plazas, como se ha manejado. Sostuvo que el organismo no tenía mayores opciones a menos que se impactaran programas centrales como la actualización del padrón electoral o la administración de los tiempos oficiales de los partidos políticos en un año en que hay 15 procesos electorales locales.
Aunque se analizaron opciones para afectar lo menos posible al denominado capítulo 1000 del presupuesto (nómina), no se pudo evitar el despido de algunos trabajadores y la determinación de reasignar otras plazas desde algunas áreas que duplicaban tareas, hacia otros sectores donde se requiere reforzar el personal, mencionó el consejero.
Oficialmente el IFE ha reconocido que las plazas recortadas en el organismo equivalen al 4.1 por ciento del total, descartando la versión de algunos trabajadores que anunciaban que el despido de personal impactaría severamente la planta, preservándose los elevados salarios de los altos funcionarios del instituto. El porcentaje mencionado sólo se refiere a los empleados de planta, excluyendo a aquellos que laboran por honorarios y que tienen ya varios años en esta condición.
La explicación oficial del ajuste es que se hace en respuesta a los reclamos ciudadanos para que las instituciones electorales sean más eficientes y gasten menos recursos. Se indica que la decisión vino tras un diagnóstico realizado a la forma como opera la estructura del organismo electoral.
Baños explicó que de manera paralela, la decisión de los consejeros fue suprimir las coordinaciones administrativas existentes en las distintas direcciones ejecutivas y unidades, por considerar que era un esquema que implicaba la duplicación de funciones con respecto a la Direccion Ejecutiva de Administración. Por ello, se eliminaron dichas coordinaciones y se concentraron sus tareas en una sola área.
El consejero refirió que un esquema similar se aplicará para las unidades de planeación que existían, a efecto de que estas funciones se ubiquen en una sola oficina de planeación. Baños mencionó que estas determinaciones adoptadas por el instituto forman parte su propia modernización administrativa y como respuesta al ajuste presupuestal. Subrayó que aún se tiene prevista una restructuración a fondo del organismo, la cual se habrá de discutir entre los consejeros y áreas ejecutivas.
Sin embargo, descartó que esta restructuración vaya a implicar a futuro nuevos despidos, pues esta medida, aseguró el consejero, sólo se aplicó de forma única para hacer frente al recorte presupuestal.
Replanteamiento de estructuras
En principio, de acuerdo con lo que han manifestado algunos consejeros, el IFE requerirá de un replanteamiento a fondo de sus estructuras para adecuarlas a los nuevos requerimientos derivados de la reforma electoral. Aunque se han reforzado algunas áreas que han recibido una recarga de trabajo (las oficinas de Prerrogativas, donde se adscribió el monitoreo de espots o la Dirección Juridica), no ha sido todavía suficiente para afrontar las necesidades actuales.
Por ello, el IFE ha determinado que en este año, el único donde no tiene actividad de organización electoral a nivel federal, se realicen las adecuaciones institucionales pertinentes para enfrentar las elecciones presidenciales de 2012.