Ramón Corral Ávila, comisionado nacional de pesca y acuacultura de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), descartó que el retiro de la certificación por Estados Unidos a la flota camaronera mexicana derive en una situación similar a la del atún.

En este último caso se trató de una disposición judicial; el del camarón es una situación administrativa, la cual se puede revertir cuando la flota camaronera cumpla con las observaciones sobre el uso adecuado de los dispositivos excluidores de tortugas marinas (DET), afirmó.

Precisó que la disposición de Estados Unidos, vigente a partir del 20 de abril, surte efecto para las embarcaciones que pescan atún en altamar, pero no afecta al camarón de acuacultura ni al de esteros y bahías, que representan casi 80 por ciento de la producción nacional, que es de 196 mil toneladas.

Existen mil 417 embarcaciones camaroneras propiedad de 618 empresas, que generan 9 mil 70 empleos directos, las cuales captan 72 millones de dólares por exportaciones en tallas de mercado que sólo aporta la pesquería de altamar. La captura y camaronicultura generan 225 mil empleos y sus ventas por exportaciones son de 359 millones de dólares.

Aseguró que la mayoría de las embarcaciones camaroneras del país cumplen con las especificaciones que exige Estados Unidos para acceder a su mercado, pero por error de tres se canceló la certificación a México. Los propietarios de las naves, capitanes o patrones que no se apegaron a la norma sobre el uso obligatorio de los DET están bajo proceso judicial y serán sancionados conforme a la ley general de pesca y acuacultura sustentable.

La próxima temporada de captura de camarón, los inspectores de Estados Unidos volverán a verificar que los barcos mexicanos porten y utilicen correctamente los dispositivos excluidores de tortugas durante las maniobras de pesca. Como autoridad pesquera sostuvimos reuniones con nuestros homólogos de Estados Unidos para solicitarles que consideren hacer de nuevo la verificación y recertificar al camarón antes de concluir la actual temporada. Nos plantearon que ello no era posible, pues estamos a dos semanas de concluir la temporada y del inicio de la veda y sería muy pronto volver a verificar; además, tienen su agenda con otros países que exportan camarón a Estados Unidos.

Corral Ávila asentó que es altamente probable que los inspectores realicen las verificaciones en la próxima temporada que se inicia en septiembre en el Pacífico, y entre junio y julio en la zona del Golfo de México. Durante la veda y el lapso para la próxima verificación se trabajará con los camaroneros para solucionar las anomalías detectadas en algunos barcos, corregir las fallas y tomar las medidas estrictas para garantizar que no se afecte a la tortuga marina en las labores de pesca del crustáceo en altamar.

Expertos estadunidenses participan en los cursos de capacitación que ya se imparten a rederos de la flota de Sinaloa, donde se concentra parte importante de las embarcaciones camaroneras.

Sostuvo que las autoridades mexicanas no esperamos que lleguen los inspectores de Estados Unidos para actuar contra quienes incumplen con abrir las redes excluidoras de tortugas. Oficiales de Conapesca y de la Procuraduría de Protección al Ambiente mantenemos una vigilancia constante durante la temporada camaronera para verificar que las embarcaciones operen con los DET.