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Decenas huyeron el domingo; murieron ocho en un enfrentamiento

Rastrea la Armada a presuntos zetas que huyeron de rancho en Nuevo León
 
Periódico La Jornada
Martes 16 de marzo de 2010, p. 8

Elementos de fuerzas especiales de la Armada continúan con el operativo para detener a presuntos integrantes de Los Zetas que escaparon el pasado domingo del rancho La Lagunilla, ubicado en Nuevo León, donde fueron abatidos ocho supuestos miembros de ese grupo delictivo.

Fuentes oficiales confirmaron lo anterior, y añadieron que información de inteligencia naval señala que los cerca de 80 sujetos que se encontraban en el lugar cuando llegaron las unidades de la Marina estaban organizando una serie de ataques contra grupos antagónicos, sobre todo del cártel del Golfo.

El operativo del domingo se inició cuando elementos de fuerzas especiales de la Armada llegaron en helicóptero a las inmediaciones de ese rancho. Numerosos presuntos sicarios, al sentirse descubiertos, huyeron en unas 15 camionetas de lujo, en tanto que otros corrieron hacia el monte.

En su huida, explicó la dependencia en un comunicado, los sicarios sostuvieron varios enfrentamientos con los marinos, lo que dejó ocho delincuentes muertos. Se incautaron cinco vehículos, nueve armas largas y dos cortas, 35 cargadores, 717 cartuchos y equipos de comunicación.

Los informantes añadieron que el operativo de búsqueda se mantiene, y no descartan que entre los detenidos o muertos se encuentren líderes de Los Zetas en el norte del país, aunque esa parte de las indagaciones corresponde a la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada de la Procuraduría General de la República.

Por otra parte, en el comunicado de prensa la Secretaría de Marina precisó que en el contexto de las labores de inteligencia contra el crimen organizado en Nuevo León se identificó a un grupo de más de 60 personas en las cercanías del poblado Bustamente, en el rancho La Lagunilla.

Añadió que los marinos identificaron un convoy de varias camionetas, cuyos tripulantes abrieron fuego contra los elementos de la Armada, con lo que comenzó el primero de varios enfrentamientos, que concluyeron con los ocho sicarios muertos, sin que se informara si hubo heridos o detenidos.