Cuautitlán Izcalli, Méx., 17 de marzo. Al menos 300 vecinos de la colonia Ejido de Guadalupe cumplieron este miércoles más de 24 horas pertrechados en sus domicilios para protegerlos de integrantes de la organización priísta Antorcha Popular, quienes, con la anuencia de autoridades estatales, comenzaron a derribar cinco viviendas y se apoderaron de varios lotes.

Una mujer amagó con hacer estallar un cilindro de gas. ¡Por mi predio yo voy a dar la vida!, advirtió Magdalena Victoriano García, habitante del número 188B de la calle Lago de Cuitzeo. Explicó que su hermano León, quien vive en Estados Unidos, ha enviado dinero durante cinco años para construir la casa.

Colonos que permanecían en sus viviendas juntaron piedras y palos para defenderse. Cinco familias que pasaron la noche del martes en la calle tras ser despojadas de sus casas deambulaban el miércoles por la colonia. Los antorchistas forzaron las chapas de domicilios y perforaron muros y techos para entrar.

El martes, al menos 200 antorchistas provistos de palas, picos y mazos llegaron encabezados por Héctor Javier Alvarez Ortiz, quien, planos en mano, entregó lotes a integrantes de su organización, dijo Belén Arbizu Galván, presidente de la Asociación Civil de Colonos de Ejido de Guadalupe.

Hemos pedido ayuda al gobierno municipal y al del estado de México, pero nadie nos hace caso, y ahora nos sacan de nuestras viviendas, afirmó el dirigente vecinal.

Un grupo de antorchistas vigila la colonia e impide el paso a reporteros, mientras una treintena de policías observaba de lejos .

Eleuterio Ortega Silva, ex presidente del comisariado del ejido de Guadalupe –a partir del cual se construyó la colonia– ha vendido los mismos lotes en más de una ocasión, y la regidora del municipio de Nicolás Romero, María de la Luz Jiménez Olvera, ha promovido la invasión de predios, acusaron los colonos.

Burócratas a cargo de Marcela González Salas, directora regional de Gobernación, dijeron que la funcionaria aclararía las acciones de los antorchistas, lo que no cumplió.