Para el combate al crimen organizado, el gobierno mexicano solicitará a su contraparte estadunidense homologar políticas públicas para evitar que los esfuerzos de ambas naciones queden como estrategias disfuncionales e inútiles.

Hay un acuerdo de ayuda mutua (para hacer frente al narcotráfico), pero es necesario identificar qué nos hace daño. En la reunión binacional de la próxima semana veremos el margen de colaboración conjunta bajo la lógica de la soberanía, pero también de la eficiencia, indicaron fuentes de alto nivel del gobierno federal.

Durante los preparativos del encuentro programado para la próxima semana en la ciudad de México, los funcionarios analizan los problemas operativos que conlleva, por ejemplo, que en nuestro país se combata el tráfico de armas mientras que en Estados Unidos este mercado es libre y legal.

La cita de los máximos responsables de la seguridad interna de ambas naciones no tiene una agenda de inicio, aunque como objetivo inicial habrá una presentación política de los planes de colaboración que persiguen los presidentes Felipe Calderón y Barack Obama.

Lo anterior, en el contexto de la exigencia del gobierno mexicano para que su contraparte ataque con la misma contundencia aspectos como el tráfico de armas y, en especial, el tráfico y consumo de drogas, ámbitos en donde los integrantes del Consejo de Seguridad Nacional de México han encontrado un desencuentro en materia de políticas públicas.

Del lado mexicano, participarán en el encuentro de la próxima semana los titulares de Gobernación (en su calidad de secretario ejecutivo del gabinete de seguridad), los secretarios de la Defensa Nacional, Marina, Seguridad Pública y Relaciones Exteriores, así como el procurador general de la República, entre otros.

Por parte de Washington vendrán a México la secretaria de Estado, Hillary Clinton, y Janet Napolitano, de Seguridad Interna. En el equipo están también la administradora de la agencia antidrogas, Michele M. Leonhart; el director de la oficina del Tesoro de control de bienes en el extranjero, Adam Szubin; el director de Inteligencia, Denis Blair, y el jefe del estado mayor conjunto, Michael Mullen.

El análisis de la grave situación de seguridad en la frontera con Estados Unidos se explica también por la ausencia en la compatibilidad de los programas oficiales porque –comentaron las fuentes consultadas– la experiencia nos dice que hay colaboraciones virtuosas y otras que no lo son. La reunión binacional en referencia es preparatoria del encuentro de los mandatarios de México y Estados Unidos, programada para el 19 y 20 de mayo.