Domingo 21 de marzo de 2010, p. a18
Buenos Aires. Ganar es el único objetivo que tendrán Boca Juniors y River Plate cuando se enfrenten este domingo en el clásico del futbol argentino, que se presenta devaluado por la mala campaña de ambos equipos en el torneo Clausura, que lidera Independiente. El duelo, que tendrá a casi mil policías desplegados en un celoso operativo de seguridad en las calles aledañas y dentro del estadio de la Bombonera, será vital para las aspiraciones de los eternos rivales. Boca, que lleva siete partidos sin ganar, tratará de impedir que River logre su primera victoria en cuatro años en la en la cancha xeneize.