La Procuraduría General de Justicia del estado de México (PGJEM) obtuvo una orden de arraigo contra los padres y a las dos nanas de la niña Paulette Gebara Farah, quien desapareció de su hogar en el municipio de Huixquilucan el 21 de marzo.

El titular de la dependencia, Alberto Bazbaz Sacal, indicó en Toluca que no hay evidencias de que esas personas sean responsables, pero sus declaraciones han sido contradictorias.

La medida permitirá tener ubicados a los padres, Mauricio Gebara y Lisett Farah, y a sus nanas, Érika y Martha Casimiro.

Se ha buscado a la menor en 66 domicilios, incluidos los 53 departamentos del edificio Porto Vita, en el número 11 de la calle Siervo de la Nación, donde vivía la menor, al igual que en otros ubicados la zona metropolitana y en dos delegaciones del Distrito Federal.

Una primera versión indica que el padre de Paulette dejó a la niña en su casa –ubicada en una de las zonas más exclusivas de Huixquilucan– después de pasar el fin de semana en Valle de Bravo. La menor fue recibida por su madre y sus nanas.

De acuerdo con Lisett Farah, llevó a la niña a su habitación, esperó a que se durmiera y salió de la recámara. Al día siguiente la niña ya no se encontraba.

La dependencia boletinó una fotografía de la niña y detalló que ésta padece discapacidad motriz y de lenguaje, además de presentar como seña particular una cicatriz en la espalda del lado de izquierdo.

La mañana del domingo, Bazbaz Sacal afirmó que no hay indicios de que un intruso haya entrado a la vivienda donde estaba la niña para secuestrarla.