Jesús Corona recibió el golpe más duro en su carrera como guardameta: no irá al Mundial. Lo dice abiertamente el jugador de Cruz Azul, porque tenía la ilusión de jugar en Sudáfrica y era uno de los candidatos fuertes para integrar el Tricolor, pero pasó por un mal momento.

Tras estar involucrado en un incidente ajeno a las canchas fue confinado a la banca en su equipo, y el problema se volvió escándalo. En la convocatoria de ayer, de la que saldrá la lista definitiva para la selección nacional, no está el nombre del portero celeste.

Sí, duele, dice el jugador de 29 años de edad: era un objetivo que no se cumplió. Un sueño no realizado. Sobre todo –refiere– porque tenía una carrera en ascenso y los llamados que tuvo al Tri le dieron razones suficientes para estar ilusionado.

Sin embargo, ayer fue distinto. Está desilusionado, no lo niega, aunque tampoco quiere sentirse víctima de una decisión injusta de Javier Aguirre. Ahora no me toca. No estoy pasando por mi mejor momento, señala para alejar polémicas y justificar la decisión del Vasco: Para estar en la selección hay que estar en las mejores condiciones.

Sólo espera que la decisión de no llamarlo al Tricolor sea por motivos exclusivamente deportivos y no por el problema que vivió tras golpear a un sujeto en una discoteca. Hecho que negó al principio, al asegurar que lo confundían con un primo, pero finalmente un video reveló que Corona sí era responsable y lo aceptó públicamente.

Aguirre nunca me regañó. Todos cometemos errores. Ahora no me queda sino agradecer las convocatorias en las que estuve, comentó Corona sobre la charla que sostuvo con el seleccionador nacional.

Hace una pausa y respira profundo: “Me arrepiento por cómo manejé esa situación –el incidente–, pero no por lo que hice. Cualquier ser humano habría hecho lo mismo”.

Admite que luego de ese problema tuvo una baja en el nivel de juego que lo afectó un poco, pero que luego de dar la cara empezó a recuperarse: “Quiero pensar que fue por eso –una baja de juego por la que no lo llamaron al Tri–, y no por otra cosa”.

Corona asegura que pese a esta desilusión no bajará los brazos, porque es un profesional y así es el futbol; empezará a trabajar para el futuro: Todo puede pasar y yo haré el esfuerzo. Y sobre los tres porteros convocados por Aguirre, dijo: les deseo la mejor de las suertes.

El cementero Gerardo Torrado no quiso abundar sobre la exclusión de su compañero de equipo: “No lo veo justo, pero no voy a juzgar eso. La decisión la toma el cuerpo técnico. Chuy tiene nuestro apoyo y es un gran portero”.

Sobre el llamado del arquero Óscar Pérez, reconoció las cualidades del veterano para pelear por un puesto. Y nada más, salvo que estar en la lista para la selección mexicana es motivo de orgullo.