Bagdad, 4 de abril. Al menos 30 personas murieron y más de 200 resultaron heridas en tres atentados suicidas perpetrados con coche bomba en Bagdad que iban dirigidos contra las embajadas de Irán, Egipto y Alemania, principalmente, aunque también dañaron las legaciones diplomáticas española y siria.

El ministro iraquí de Relaciones Exteriores, Hoshyar Zebari, afirmó que estos ataques tienen la marca de Al Qaeda, y recuerdan los atentados de los últimos meses contra hoteles y oficinas.

Los dos primeros ataques ocurrieron en el barrio Mansur: uno a la entrada de la embajada egipcia, en parte destruida, y otro cerca de las embajadas alemana, española y siria. Minutos después hubo otra explosión cerca de la representación diplomática de Irán, en el barrio de Salhiyé.

Efectivos iraquíes frenaron un cuarto vehículo con explosivos en el barrio de Masba, que sería usado al parecer contra el cuartel general de las fuerzas de seguridad, dijo el vocero de la jefatura militar de Bagdad.

En Berlín, la canciller federal alemana Angela Merkel se declaró profundamente afectada por estos atentados, en especial por el que ocurrió cerca de la legación diplomática de su país, donde murió un miembro de la seguridad iraquí.

La cancillería española indicó en Madrid que su embajada, contigua a la alemana, sufrió cuantiosos daños materiales, pero no hubo que lamentar víctimas.

La Unión Europea y Francia, por separado, condenaron los atentados, que ocurren en medio de la lucha por el poder que se desató tras los comicios parlamentarios del 7 de marzo. Ninguno de los dos contendientes ganó suficientes escaños para lograr una mayoría en el Parlamento, pero el vencedor de los comicios, Iyad Allawi, al frente de una coalición secular, quiere suceder en el gobierno al actual primer ministro chiíta, Nuri Maliki, que pretende seguir en el poder e intenta forjar una alianza con los kurdos chiítas.

En Pakistán, por otra parte, el ejército abatió a cerca de 40 rebeldes e hirió a otros 14 en ataques terrestres y de la aviación en la región noroeste de Orakzai.

En Afganistán, cuatro civiles y un soldado de la Organización del Tratado del Atlántico Norte fallecieron al estallar, por separado, sendas minas artesanales en el sur del país, en tanto que el ministerio alemán de Defensa reconoció, en Berlín, que el viernes, soldados alemanes mataron por error a seis soldados afganos en el norte de Afganistán.