Se encontraba con familiares cerca de la central TAPO; regresaban de vacaciones
La obesidad del adolescente causó el daño cardiaco, asegura doctor que lo atendió
Sábado 10 de abril de 2010, p. 30
Un niño de 13 años de edad murió por un paro cardiaco, aparentemente a consecuencia de la obesidad que padecía, cuando se encontraba con familiares en un paradero ubicado en Artilleros y Eduardo Molina, muy cerca de la Terminal de Autobuses de Pasajeros Oriente (TAPO), delegación Venustiano Carranza.
Fuentes de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) señalaron que los hechos ocurrieron poco antes de las 14 horas cuando el menor, de nombre Alejandro y con un peso de 120 kilos, se encontraba en el anden G del referido Centro de Transferencia Modal junto con su tía y abuela, se desvaneció y cayó al suelo.
El adolescente y sus familiares aparentemente llegaban de vacaciones y se disponían a tomar un autobús de regreso a casa cuando ocurrió el incidente, por lo que la tía, identificada como Isabel Lozano, llamó a su médico familiar.
Hasta el lugar llegó el doctor Fernando Valenzuela, quien según las fuentes consultadas, certificó que el joven falleció por un paro cardiaco, además de que manifestó que el niño padecía del corazón a consecuencia de su obesidad.
Personal Ministerial de la Coordinación territorial Venustiano Carranza 1 tomó conocimiento de los hechos, pero debido a que la muerte fue por causas naturales y a petición de la misma familia no se inició una averiguación previa.
Según la información proporcionada, el cadáver del menor fue trasladado por sus familiares a una funeraria cercana al lugar de los hechos, donde iniciaron los trámites para el sepelio.