El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) ha mantenido, desde la llegada del PAN a la Presidencia de la República en el año 2000, un amasiato con el poder que le ha permitido obtener fondos millonarios, como más de 3 mil 500 millones de pesos sólo para el programa de carrera magisterial;  en cambio los aumentos directos al salario de los profesores de base no han rebasado 6 por ciento, lo cual representa poco más de 8 pesos diarios. Excepto en 2001, cuando alcanzó 11 por ciento.

Especialistas en la materia aseguraron que la relación de los gobiernos panistas con el gremio que encabeza, desde hace 21 años Elba Esther Gordillo Morales permitió un incremento de poder de la cúpula elbista que ha trastocado la relación de la Secretaría de Educación Pública (SEP) con el SNTE.

Más aún, existe un hecho inédito en el mundo: que un sindicato tenga su propio órgano político-electoral, como es el Partido Nueva Alianza, que lo convierte en un jugador central en los procesos comiciales, explicó Marco Antonio Leyva, especialista en sindicalismo de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), a lo que se suma su afianzamiento en el poder, dentro del sistema educativo, con la Alianza por la Calidad de la Educación, suscrita en mayo de 2008.

Olac Fuentes Molinar, ex subsecretario de Educación Básica y Normal de la SEP, señaló que la estrecha relación del gremio magisterial con el gobierno no nació con el PAN, pero ha alcanzado un nivel distinto. El signo del cambio es un enorme crecimiento del poder en el grupo sindical dominante, en especial en su relación con la Presidencia de la República y la secretaría.

Esto sin duda, afirmó, ha permitido al gremio obtener condiciones mucho más favorables, en contraste con cualquier otro grupo de trabajadores, pero este mismo proceso para alcanzar concesiones ha favorecido un incremento fuerte de la desigualdad salarial dentro del SNTE. Es decir, un pequeño sector obtiene condiciones salariales mucho más altas que el conjunto de los trabajadores de la educación.

A partir de la última negociación con el gobierno priísta, en mayo de 2000, cuando los maestros obtuvieron un alza de 12 por ciento directo al salario y 3 por ciento en prestaciones, la media del aumento económico para los docentes de 2002 a 2009 es menor a 6 por ciento, pues en tres años (2002, 2003 y 2006) se alcanzó 5.5 por ciento de incremento, mientras en 2005 éste fue de sólo 4.3 por ciento.

Manuel Gil Antón, catedrático de la UAM, afirmó que pese al compromiso de los gobiernos panistas de no mantener una relación corporativa y caciquil con los sindicatos, en la relación de las autoridades educativas con el sindicato se acabó la sana distancia en la conducción de la política educativa que se había alcanzado con el PRI, para acabar en un amasiato SEP-SNTE, en el que nadie sabe quién manda.

Es claro el papel fundamental que tienen los maestros en cualquier esfuerzo de transformación de la educación en México, indicó; “pero la cúpula sindical no puede ser coautoridad ni mucho menos la autoridad en sí misma. Enfrentamos un gobierno blanquiazul esquizofrénico que en el discurso está contra el sindicalismo corporativo y opaco, como el SNTE, pero en la práctica lo necesita para gobernar”.

En cuanto a los logros alcanzados como parte de las negociaciones SEP-SNTE en nueve años, la barrera del incremento en prestaciones osciló de 3 por ciento en el año 2000 a 1.5 por ciento durante seis años, mientras en 2004 y 2008 sólo alcanzó uno por ciento de aumento, y en 2001, 2 por ciento.

El monto del primer año de las administraciones panistas a la fecha, para programas del SNTE, como carrera magisterial, acumuló más de 3 mil 500 millones de pesos; al plan de tecnologías educativas y de la información se han destinado mil 900 millones de pesos, además de la edificación de 70 mil viviendas para el magisterio, entre otros fondos. Tan sólo el año pasado, el gremio que encabeza Gordillo Morales logró en total 2 mil 416.8 millones de pesos en distintos programas, y un total de 4 mil 484.7 millones para infraestructura escolar y mantenimiento de los planteles.