Al margen de la descentralización educativa que desde hace dos décadas se impulsó en las diferentes entidades del país, el Gobierno del Distrito Federal logró ayer que la Secretaría de Educación Pública (SEP) le transfiriera la operación de los 242 centros comunitarios que imparten educación prescolar en la capital.

Durante años, estos centros, que atienden a una población de 12 mil 400 menores de zonas de alta marginación, habían permanecido en el olvido para la dependencia federal, e incluso estuvieron en riesgo de desaparecer por las nuevas disposiciones de las autoridades educativas, sobre todo en materia de seguridad.

Sin apoyo gubernamental, los kínderes subsisten en condiciones precarias en casas o inmuebles prestados y operan mediante cuotas simbólicas que las madres beneficiadas aportan. De la SEP han obtenido la validez y reconocimiento de la educación prescolar que imparten, pero también múltiples presiones para operar.

En octubre del año pasado, este diario publicó que estos centros estaban en riesgo de desaparecer, pues no contaban con los recursos para cubrir las exigencias de la autoridad para su regularización, como contar con uso de suelo apropiado, seguridad estructural y dictámenes de protección civil.

Ayer, en un comunicado, la Secretaría de Educación del Distrito Federal informó que a partir de ahora será la responsable de garantizar el cumplimiento de las disposiciones aplicables con el fin de que los centros comunitarios cumplan con las normas de seguridad e higiene necesarias para salvaguardar la integridad física, sicológica y social de la comunidad escolar.

Ello, luego de que mediante un convenio signado entre Mario Carrillo, titular de la dependencia capitalina, y Luis Ignacio Sánchez Gómez, administrador federal de los Servicios Educativos en el Distrito Federal, se delegó la responsabilidad de dar atención y seguimiento al funcionamiento de estos kínderes.

La Administración Federal de Servicios Educativos realizará las acciones necesarias para facilitar la incorporación de los menores a los planteles que administra cuando así lo soliciten.

Las direcciones generales de Operación y Servicios Educativos y de Servicios Educativos de Iztapalapa, por la administradora federal, y la Secretaría de Educación del Distrito Federal serán directamente responsables del cumplimiento de este compromiso.