Los grupos parlamentarios del PRI en el Senado y la Cámara de Diputados presentaron ayer una iniciativa de ley del sistema nacional de banca de desarrollo, para dotarla de mayor autonomía y permitirle otorgar créditos a particulares y empresas que no son sujetos de apoyo de la banca privada.

Se busca construir un sector financiero competitivo, porque la banca comercial da crédito al consumo, con tasas leoninas, y al sector público, sin correr ningún riesgo, pero no a la producción. La iniciativa pretende que la banca de desarrollo conceda empréstitos a la producción y fuerce a la comercial a bajar sus tasas de interés, explicó el ex secretario de Hacienda David Ibarra Muñoz.

La propuesta, elaborada por senadores y diputados, con el respaldo de ex funcionarios bancarios en los gobiernos del PRI, señala que el acceso al crédito es discrecional y carente de reglas a través de recursos subsidiados, y sin rendición de cuentas.

Plantea la constitución de un Consejo Nacional de Financiamiento al Desarrollo, en el que participen los directivos de Nacional Financiera, Banco Nacional de Comercio Exterior, Financiera Rural, Banco Nacional de Obras, Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros, Banco del Ejército y Sociedad Hipotecaria Federal.

Asimismo, que dicho consejo esté integrado por tres consejeros profesionales y un secretario ejecutivo, encargado del seguimiento de los acuerdos, elaborar un informe anual y participar en las sesiones.

También se considera que en el consejo converjan las secretarías de Hacienda, Desarrollo Social, Agricultura, Energía, Turismo, Comunicaciones, Medio Ambiente y Economía.

Para hacer compatibles las leyes orgánicas de los bancos con la nueva política de crédito, se considera que sus normas sean modificadas en el periodo de sesiones de septiembre, a la par de la negociación del paquete económico de 2011.

En conferencia de prensa, la senadora María de los Ángeles Moreno afirmó que el objetivo de la ley es atender al mercado interno de crédito y a las micro, pequeñas y medianas empresas, e inclusive a las grandes compañías detonadoras del crecimiento.

Explicó que además se quiere que el financiamiento a la banca de desarrollo no dependa sólo de los recursos que se aprueban anualmente en el Presupuesto de Egresos de la Federación, sino que pueda captar recursos del mercado interno o del externo; movilizar ahorro para encaminarlo a proyectos de inversión y colocar bonos.

La senadora explicó que en la confección del proyecto participaron, además de David Ibarra, el ex subsecretario de Hacienda Francisco Suárez Dávila y los ex directores del Banco Nacional de Comercio Exterior Alfredo Phillips Olmedo y Enrique Vilatela, así como el ex secretario de Hacienda Jesús Silva Hérzog.