Alarmante, así es el panorama que observa en la actualidad el trombonista Faustino Díaz para los instrumentos de metal en la música de concierto en México.

Las escuelas de música no tienen un programa de estudios adecuado, con el que los jóvenes puedan avanzar; la mayoría deserta antes de terminar la carrera; muchos se dejan llevar por el mercado de la música sinaloense, de banda, porque allí hay dinero y una vida más fácil, explica el joven intérprete, considerado hoy día uno de los más importantes del país en su especialidad.

Entonces dejan un panorama muy duro para los metales. Las escuelas de música llevan muchos años y no generan tantos profesionales en los metales. Es una situación nada agradable, sobre todo porque no hay mucha gente que se interesa en salir a otros países y regresar para hacer una escuela. La mayoría de los músicos de metal que encuentran trabajo en una orquesta, allí se quedan.

De acuerdo con el músico, quien actuará este fin de semana como solista en el programa con el que la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México (OFCM) inaugurará su Temporada de Primavera, esa grave situación de los metales en el país resulta paradójica ante de la importancia y el profundo arraigo que los instrumentos de aliento tienen en la música tradicional mexicana.

Simplemente en Oaxaca, que es el estado con más tradición musical de bandas de viento, no hay una sola escuela de música. La mayoría de oaxaqueños tiene que venir a estudiar a la ciudad de México y muchos corren con la mala suerte de no tener trabajo, familiares, ni apoyo, entonces desertan, indica.

En entrevista, Faustino Díaz destaca el desarrollo y el papel que en los 30 años más recientes ha adquirido en el mundo el trombón como instrumento solista, posición que en gran medida se debe al sueco Christian Lindberg, el más virtuoso y famoso ejecutante que ha existido de ese instrumento en toda su historia.

Fue a partir de 1980 cuando el trombón renació como instrumento solista, aun por encima de la trompeta y el corno. Eso ha sido posible gracias a Christian Lindberg, tanto porque ha escrito obra como porque le han compuesto piezas para que él interprete.

En su actuación con la OFCM, la cual será dirigida por el italiano Stefano Mazzoleni en calidad de huésped, Díaz estrenrá en México Mandrake en la esquina, concierto para trombón y orquesta de Christian Lindberg. De igual manera, interpretará el Concierto para trombón alto, de Leopoldo Mozart, padre de Wolfgang Amadeus.

El programa se completa con Tres cartas de México, del michoacano Miguel Bernal Jiménez, cuyo natalicio se cumplió este año, y La noche de los mayas, del duranguense Silvestre Revueltas, en el 70 aniversario de su muerte.

La temporada de Primavera 2010 de la OFCM constará de 11 programas, los cuales tendrán lugar del 17 de abril al 27 de junio. Los conciertos serán los sábados y los domingos en la Sala Silvestre Revueltas del Conjunto Cultural Ollin Yoliztli (Periférico Sur 5141, colonia Isidro Fabela), a las 18 y 21 horas, de forma respectiva.