Lunes 19 de abril de 2010, p. 36
Jiegu, 18 de abril. Al visitar a los heridos del terremoto que hace cuatro días devastó la meseta tibetana, en el noroeste de China, el presidente Hu Jintao pidió a los socorristas continuar la búsqueda de sobrevivientes y afirmó que “cada vida es un tesoro”. El exhorto se produjo tras el rescate de un hombre de 68 años que permaneció más de 100 horas atrapado bajo los escombros, mientras la cifra de muertos llegó a mil 706, con 256 desaparecidos.