Los americanistas ya no quieren a Chucho Ramírez en el timón
uchos americanistas rezan para que Atlas y Cruz Azul ganen en la jornada 17, avancen a la liguilla como los dos mejores terceros lugares y de una vez por todas se concrete la eliminación del equipo de Coapa, con la consecuente salida del técnico Jesús Ramírez, quien con todo y su prioritario trabajo mental se pasó el torneo Bicentenario dando una de cal por dos de arena.
Lo cierto es que las Águilas fueron golpeadas por muchas desgracias. El lamentable caso del paraguayo Salvador Cabañas, cuyo rendimiento fue en franco declive cuando se concretó su compra y luego de recibir un sustancial aumento salarial. Otro fallido fichaje fue el de Aquivaldo Mosquera, quien sólo ha brillado en Pachuca.
El zaguero colombiano, a quien supuestamente la directiva adquirió en rebaja de 50 por ciento por 4.2 millones de euros al Sevilla, se pasó el torneo lesionado y para colmo de males se hizo expulsar el pasado sábado en Monterrey, cuando todos esperaban que agarrara buen paso. Aquivaldo dio más nota en febrero, cuando en un entrenamiento se hizo de golpes con su compañero Ángel Reyna.
El trabajo mental y motivacional no alcanzó. Para Ramírez esas fueron sus herramientas clave en la conquista del título Mundial Sub-17 en Perú 2005. Sin embargo, en el nido las charlas y películas no llegaron a las fibras sensibles de sus dirigidos. En cambio, fueron cuestionados y criticados sus cambios, como la rutinaria e inexplicable salida de Reyna en muchos segundos tiempos y su preferencia por Miguel Layún.
De manga muy ancha debe ser el torneo al punto de que Pumas, que durante la primera parte del certamen marchó con bajo perfil, hoy es flamante tercer lugar de la tabla general y cuarto invitado a la liguilla, junto con Monterrey, Chivas y Toluca, a pesar de tener a dos jugadores que recorrieron el torneo sin pena ni gloria: Leandro Augusto y Dante López.
Tal parece que la enjundia de Leandro se esfumó tras el manoseo de Sven Goran-Eriksson y luego de reponerse de una lesión, a partir de ahí, jamás recobró la entrega que lo caracterizaba. Dante es a Tuca lo que Layún a Chucho Ramírez, y ahora Ricardo Ferretti deberá apelar a su influencia sobre las barras auriazules, capaces de aniquilar con cánticos a López, como recientemente lo hicieron con Cabañas y Oswaldo Sánchez.
Pumas, que aportó tres jugadores al Tri, no se desplomó como ocurre con Chivas. Cinco bajas fueron demasiadas y el equipo tapatío hoy se precipita incontenible. Sus presuntos soportes serían los veteranos Omar Bravo, Héctor Reynoso y Aarón Galindo, quienes no responden y el cuadro rojiblanco luce famélico y no muestra juego de conjunto; es sólo un disperso puñado de luchones futbolistas.
El Guadalajara se clasificó demasiado pronto; pero, ¿para qué? El reto de José Luis Real es armar al vapor un plantel competitivo, aunque como no recibió suficientes refuerzos, el fracaso de antemano está justificado por la salida de Javier Hernández, Jonny Magallón, Adolfo Bautista, Luis Ernesto Michel y Alberto Medina, más la lesión del portero Hugo Hernández, rumbo a la liguilla y hacia la Copa Libertadores.
Cruz Azul en cambio no tiene excusa. Enrique Meza recibió refuerzos foráneos y aporte de sus fuerzas básicas. El técnico intentó una adecuada rotación de su plantel y sin embargo el pase a cuartos de final no está claro. El equipo cementero, que ya es subcampeón de la Concachampions y va por el título ante Pachuca, sabe que su afición y directiva están hartos de segundos lugares y exigen títulos.
Los Rayados de Víctor Manuel Vucetich han sido el equipo más regular del certamen y son sólidos aspirantes al bicampeonato, sin descartar al siempre avezado en esas lides, Toluca. El Monterrey empató la marca de máxima cosecha de puntos (35) en torneos cortos, que logró Miguel Herrera en el Apertura 2005, y puede superarla si vence la próxima semana al Morelia.
Para Tigres fue cosa nada más de sacudirse la presión. El equipo de Daniel Guzmán, ya sin el asfixiante rechazo de su público, con un duelo a puerta cerrada y otros como visitante, resultaron decisivos para comenzar a ganar y escalar posiciones en la tabla de cocientes. Ahora se da por hecho la continuidad del Travieso y del directivo Santiago Martínez.