En Cruz Azul ser subcampeón ya no sirve, puntualizó el defensa Melvin Brown, quien sostuvo que el plantel debe superar a la brevedad la mala tarde de la goleada 4-1 sufrida el domingo ante los Camoteros, porque “incluso ahora estamos pensando en ser campeones en los dos torneos (liga y Concachampions)”, añadió convencido.

En su turno, el atacante Alejandro Vela confesó que nunca pudimos entender el juego aéreo del Puebla, y advirtió que La Máquina debe afrontar la final a tope, pues nos espera un cierre importante en el que podemos tener todo o nada... Haber perdido tantas finales de manera seguida te deja el sentimiento de que ya nos toca una, para quitarnos esa maldición.

Brown señaló que es difícil asimilar la paliza recibida en el estadio Cuauhtémoc: Nunca pensamos que eso fuera a suceder, es un resultado de vergüenza, pero así es el futbol, da y quita. No obstante, “hay que dejarlo atrás rápidamente, porque el tiempo se nos viene encima y debemos enfrentar la final de ida de la Concachampions con la idea de ganar y después enfocarnos en la liga”, recalcó.

Dijo que el cuadro de La Franja los sorprendió con un gol de vestidor marcado al minuto tres, y pese a ir dando tumbos en el certamen, negó que La Máquina esté a la baja en el umbral de la liguilla, luego, ante la pregunta de si éste es el mejor Cruz Azul, razonó: Pues sí, porque no hay otro; el día que pensemos que no somos el mejor equipo estaremos acabados.

Brown prefirió enfocarse en los jóvenes con que inició Enrique Meza. Dijo que para ellos fue triste ser goleados cuando, ilusionados, sólo pensaban en mostrarse. Agregó que el técnico no acostumbra explotar contra sus dirigidos cuando el resultado es adverso, tenemos su confianza y, pese a todo, él siempre pide que no dudemos de nuestra capacidad.

Por último, en la rueda de prensa realizada ayer en La Noria, el zaguero vaticinó un partido cerrado este miércoles contra Pachuca en el estadio Azul. Aseguró que los Cementeros llegarán más alerta, ya que a veces los tropiezos son para que te engalles y saques lo mejor de ti.

Vela comentó: Todas las derrotas duelen y nunca es fácil dejarlas de lado y decir que no pasó nada. El primer tiempo contra Puebla nos desconcertó, parecía que cada llegada de ellos iba a ser gol, nunca pudimos controlar su juego aéreo. Cuando el equipo cambió de actitud ya todo estaba perdido, son de esas situaciones raras en que todo sale mal.

Al igual que Brown, el atacante insistió en mirar al frente, hacia el Pachuca, rival muy difícil, pero queremos ganar. Reconoció que se han complicado el camino, aunque finalmente tenemos vida en los dos torneos, y prometió que jugarán al máximo el miércoles, porque hemos aprendido que en una final el partido de ida marca mucha diferencia.