Nada justifica que los bancos inviertan sus recursos en valores gubernamentales: CNBV
Un mayor y eficiente flujo de financiamiento impulsará el crecimiento, coinciden funcionarios
Viernes 23 de abril de 2010, p. 25
Acapulco, Gro., 22 de abril. El gobierno federal exigió a la banca comercial que opera en México, mayoritariamente extranjera, ampliar el financiamiento para actividades productivas, porque nada justifica que continúen invirtiendo sus recursos en valores gubernamentales.
En sus participaciones como oradores de la 73 Convención Bancaria, el secretario de Hacienda, Ernesto Cordero Arroyo, el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, y el presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), Guillermo Babatz Torres, plantearon a los banqueros que un mayor y eficiente flujo de financiamiento impulsaría de manera importante el crecimiento del país.
En distintos tonos, los tres funcionarios federales dijeron que si bien se observan progresos en la recuperación económica de México, persisten riesgos del exterior como el sobrendeudamiento de algunos países europeos o una recuperación menos vigorosa de Estados Unidos, que pueden afectar negativamente al país.
“No podemos cruzarnos de brazos (…) Para el gobierno federal, el manejo responsable de la economía es y seguirá siendo prioridad”, sostuvo Cordero Arroyo.
En su turno, Babatz Torres sostuvo que el otorgamiento indiscriminado del crédito al consumo causó pérdidas por 211 mil millones de pesos, por los problemas económicos de millones de familias mexicanas que no pudieron pagar sus tarjetas.
El presidente de la CNBV criticó la práctica de los banqueros de concentrar sus recursos de inversión en valores gubernamentales. Apuntó que por primera vez en mucho tiempo, el rendimiento de los valores gubernamentales no es suficiente para justificar que los bancos concentren en ellos una parte elevada de sus inversiones, y a la vez, difícilmente podrán sustentar su rentabilidad en la expansión indiscriminada de crédito al consumo. Así, hoy los bancos están obligados a acercarse a sus clientes para atender sus necesidades y tratar de satisfacerlas con productos y servicios adecuados
, destacó.
En este entorno, advirtió Babatz, aquel o aquellos bancos que no sean capaces de servir a sus clientes podrán continuar generando una rentabilidad adecuada, concentrándose simplemente en sus actividades de inversiones de mercado o mediante la expansión de crédito al consumo mal suscrito. Sólo los que sean capaces de expandir su actividad crediticia, sin comprometer la calidad de sus activos, podrán generar ganancias acordes con las exigencias de sus accionistas.
En esas condiciones adelantó que la CNBV comenzó a aplicar un especial énfasis
en la supervisión de los procesos de suscripción crediticia, con la finalidad de que la expansión de cartera se sustente en el uso de las mejores prácticas y el reconocimiento claro y preciso del riesgo
para asegurar que no se repita, como en el pasado reciente, una expansión desordenada del crédito.
El secretario de Hacienda explicó que en previsión a los riesgos potenciales que se observan en el exterior, se han tomado las siguientes medidas: una política de acumulación de reservas internacionales de divisas, que las ha elevado a casi 97 mil 400 millones de dólares, su nivel histórico más alto; cambios a la legislación hacendaria para contrarrestar choques por el lado fiscal, y el fortalecimiento de los fondos de estabilización para mitigar la caída de ingresos ante un posible choque externo.
Cordero Arroyo criticó el bajo nivel de crédito privado que registra la economía mexicana frente a las necesidades de financiamiento de sectores como el de infraestructura y el de las pequeñas y medianas empresas. Frente a esta situación, exhortó al sector bancario a convertirse en motor de prosperidad económica
y aprovechar sus niveles de capitalización y fortaleza para impulsar la inversión y el consumo.
En su intervención, Agustín Carstens insistió en invitar a los banqueros a trabajar hombro con hombro
, como hizo el año pasado, cuando se desempeñaba como secretario de Hacienda. Esto, dijo, para lograr condiciones que permitan estimular el crecimiento del crédito en el país. Si en México lográsemos que el financiamiento al sector privado llegase al menos a niveles similares al que alcanza en economías equivalentes en tamaño, el producto interno bruto potencial del país podría crecer sustancialmente
, dijo.
Esta consideración, agregó, debe ser otro incentivo para que unamos fuerzas y nuevamente el sistema bancario nacional se convierta en un efectivo promotor del crecimiento económico de México
.
Destacó la urgencia de que el Congreso de la Unión apruebe la iniciativa presidencial para reformar la Ley Federal de Competencia Económica.
Existen dos poderosos
argumentos que sustentan esta urgencia, planteó: con una mayor competencia en los mercados aumentaría la tasa potencial de crecimiento de la economía mexicana, ya que se asignarían más eficientemente los recursos; se abrirían a la inversión con tecnologías de punta sectores de actividad productiva actualmente cerrados y se abatiría el costo de los insumos.
Además, con toda seguridad
, una mayor competencia incidiría en una enorme redistribución del ingreso, ya que más de 40 por ciento de las mercancías que consumen las familias mexicanas de más bajos ingresos corresponden a mercados en los que hoy día hay escasa competencia. Previó que en un entorno de mayor competencia el precio de esos bienes tendería a ser menor, con el consecuente beneficio para los mexicanos de menores ingresos.