Sonora, colindante con Arizona, es la segunda entidad del país, sólo después de Baja California, que recibe al mayor número de mexicanos deportados de Estados Unidos.

En el primer trimestre de este año, el gobierno del vecino país repatrió a 138 mil 501 connacionales; de esa cifra, 49 mil 199 fueron deportados por territorio sonorense, entidad donde el punto de mayor recepción de indocumentados mexicanos es Nogales.

Si bien la cifra de deportados ha disminuido respecto al registro de 2009, Baja California y Sonora continúan como los puntos de internación más activos, revelan cifras del Instituto Nacional de Migración.

La contabilidad y recepción de migrantes es posible gracias a que existe un memorando bilateral que tiene como fin garantizar, con respeto a los derechos humanos, el regreso de indocumentados. Hasta el momento no se ha precisado si ese programa –firmado en 2004– continuará en los mismos términos, luego de que en Arizona fue aprobada la norma de Inmigración, Aplicación de la Ley y Vecindarios Seguros, firmada el 23 de abril pasado por la gobernadora, Janice K. Brewer, para criminalizar a los indocumentados.

En 2009 fueron repatriados 590 mil 91 mexicanos; de éstos, 232 mil 464 regresaron por alguna garita de Baja California y 204 mil 985 por Sonora. Le sigue Tamaulipas, con 71 mil 688 deportados; Chihuahua, 53 mil 759, y Coahuila, 16 mil 631.