El Instituto Federal Electoral (IFE) avaló la virtual impunidad de más de 50 irregularidades en los manejos financieros del Partido Socialdemócrata (PSD), incluidos la no comprobación de presuntos contratos de prestación de servicios por 7 millones de pesos y el rebase de topes de campaña –usualmente muy sancionado– del ex candidato a diputado José Ángel Díaz Cuervo.

Por ocho votos a uno se determinó sólo amonestar al partido, a pesar de las numerosas anomalías en sus gastos ordinarios y de campaña.

En el centro del perdón al PSD estuvo su condición de ser un partido en proceso de liquidación y, según dijo el consejero Benito Nacif, evitar que nuevos litigios en torno a eventuales multas pudieran complicar el finiquito de la organización que perdió el registro. Su colega Marco Antonio Baños reivindico el proceso correcto de liquidación avalado por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federacion y dijo que se tomaban como precedente los aspectos regulados por la Ley de Concursos Mercantiles.

Sin embargo, el trato de empresa en quiebra fue fustigado por el consejero Alfredo Figueroa, quien deploró las pretensiones de sus homólogos de condonar irregularidades de manejos financieros y nueve quejas contra el PSD.