El Instituto de Vivienda (Invi) del Distrito Federal ha privilegiado los intereses de las grandes empresas inmobiliarias al desvirtuar los objetivos de programas como el de Mejoramiento de Vivienda (PMV), denunciaron integrantes de la asesoría técnica que participan en el citado esquema.

El PMV, explicaron, ha beneficiado a más de 170 mil familias de escasos recursos a los que se han otorgado créditos para ampliar, dar mantenimiento e incluso reconstruir su casa, además de que ha permitido crear fuentes de empleo y fomentar la economía de los barrios.

Sin embargo, afirmaron los quejosos, el director del instituto, José Antonio Revah Lacouture, trata de imponer un modelo de producción privada de vivienda pese a que el proyecto de producción social ha demostrado ser más benéfico, con mayor eficiencia en el manejo de los recursos y responsabilidad de la gente.

Un ejemplo de esa pretensión, explicaron, es que los beneficiados –quienes tienen la responsabilidad de coordinar los trabajos y administrar los recursos entregados– compran los materiales de construcción a empresas cementeras, cuando por lo general esto lo hacen en los pequeños negocios del ramo ubicados en sus colonias, explicaron los denunciantes.

Lo anterior cobra relevancia, expresó Raúl Bautista González, ex director del programa, si se toma en cuenta que de los 970 millones de pesos de presupuesto anual para el programa, la mitad se destina a la compra de materiales de construcción.

Aunado a esto, agregó el ex funcionario, removido sin justificación de su cargo el 19 de abril, se busca imponer criterios para autorizar los créditos a quienes puedan pagarlos y no a quienes más los requieren, como se estipula en las reglas del programa.

Los beneficiados con el PMV reciben créditos de entre 30 mil y 110 mil pesos, según el proyecto a realizar, y son los encargados de comprar los materiales, contratar a los trabajadores –que por lo regular son albañiles de su misma colonia– y supervisar la obra, para lo cual cuentan con la asesoría de un arquitecto, trabajador externo del Invi, que se hacen responsable de que el proyecto cumpla con las normas de construcción.

En entrevista con este diario, González Bautista dijo que también se pretende focalizar y destinar en polígonos la operación del PMV, lo que permitiría a las desarrolladoras inmobiliarias hacerse cargo de la supervisión de obra y asesoría técnica en una sola colonia, sin tener que desplazarse a diferentes puntos de la ciudad, y de esta manera reducir el personal que participa en su operación.

Además, indicó, el Invi ha retrasado la entrega de los recursos, lo que ha causado irritación social, pues hay créditos autorizados desde noviembre pasado que a la fecha no se han entregado.

Ante esta situación, los asesores técnicos y representantes de organizaciones civiles se reunirán hoy con el jefe de Gobierno del DF, Marcelo Ebrard, para manifestar su inconformidad con el rumbo que se pretende dar al PMV en detrimento de los sectores más necesitados de la ciudad.