Habitantes del Centro Histórico harán una denuncia ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en contra del Gobierno del Distrito Federal, por considerar que la construcción de una ruta de tranvía pone en riesgo los 600 monumentos históricos que datan de la Colonia.

Pablo Gutiérrez, representante del Comité Vecinal Oriente en el Centro Histórico, indicó que tanto las obras para la adecuación de las calles como la vibración constante del paso del tren deteriorarán los inmuebles, ubicados en la zona más vieja del centro.

Aún más, sostuvo que el proyecto, que considera una ruta del Zócalo a Buenavista de 10.8 kilómetros, no cuenta con el permiso del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

Explicó que a petición del comité vecinal, el instituto respondió que hasta la fecha el gobierno capitalino no ha presentado el proyecto ni ha hecho ninguna solicitud para validarlo, por lo que no se ha emitido ninguna autorización al respecto.

Detalló que calles como Jesús María, República de Guatemala, República de Uruguay, Mesones y San Pablo, entre otras, por donde circulará el tranvía, son muy estrechas, por lo que no hay espacio para la instalación de las estaciones que se pretende colocar, por lo que se tendría que modificar el entorno.

El representante vecinal dijo que las autoridades capitalinas no han tenido respeto hacia el patrimonio histórico, tal como sucedió con la reubicación de los comerciantes ambulantes. Tiraron edificios catalogados para convertir los predios en plazas comerciales, refirió.

Desde 1987, la UNESCO declaró patrimonio de la humanidad el Centro Histórico de la ciudad de México, en donde se ubican alrededor de mil 436 inmuebles con valor monumental, señaló el representante vecinal.