Pyongyang rechaza la acusación; amenaza con guerra a Seúl
Viernes 21 de mayo de 2010, p. 31
Seúl, 20 de mayo. Un submarino norcoreano hundió el 26 de marzo pasado la corbeta militar sudcoreana Cheonan en el Mar Amarillo, concluyó un informe elaborado por un grupo internacional de analistas, lo que llevó de inmediato a Seúl a acusar a Pyongyang de haber montado una provocación militar
y a convocar a la comunidad internacional a tomar medidas firmes contra el norte
.
La Comisión de Defensa Nacional de Corea del Norte calificó de inventos
los resultados del informe internacional y dijo que tomaremos medidas enérgicas, entre ellas una guerra general, si se aplican sanciones
a Pyongyang con el argumento de que atacó con un torpedo el barco sudcoreano de mil 200 toneladas, que llevaba 46 marinos a bordo.
La evidencia apunta a la conclusión de que el torpedo fue disparado por un submarino norcoreano
, afirmó Yoon Duk-yong, uno de los integrantes sudcoreanos del grupo de investigadores, que incluyó especialistas de Estados Unidos, Gran Bretaña y Suecia, pero ningún observador de países cercanos a Corea del Norte.
El informe, difundido en el sitio en Internet del diario Christian Science Monitor de Boston, indicó que una fuerte explosión bajo el agua, generada por la detonación de un torpedo buscador
, que golpeó a la izquierda del compartimiento de una turbina de gas
, ocasionó que el Cheonan se partiera en dos y se hundiera.
El presidente surcoreano, Lee Myung-bak, informó que este viernes sostendrá una reunión de emergencia con su Consejo de Seguridad Nacional. Tomaremos medidas firmes contra el norte y, a través de la cooperación internacional, debemos hacer que el norte admita su acción.
Previamente, Seúl había anticipado que este asunto llevaría al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, pese a que un proyecto de fortalecimiento de sanciones podría enfrentar el veto de China, vecina, socia comercial y aliada política de Pyongyang a lo largo de varias décadas.
El Ministerio de Relaciones Exteriores chino llamó a la calma y la contención
de las partes involucradas en este caso –actores de un conflicto de la guerra fría que estalló en 1950– y pidió que eviten una escalada
.
La Casa Blanca emitió un comunicado donde señaló que este acto de agresión es una instancia más del comportamiento inaceptable de Corea del Norte y su desafío a las leyes internacionales
.