Sábado 22 de mayo de 2010, p. a17
Curitiba. La selección de Brasil se reunió por primera vez, aunque incompleta, en Curitiba, para iniciar en un centro de prácticas su trabajo previo al Mundial, y fue recibida por una multitud de hinchas, periodistas y hasta un brujo. Entre los más pintorescos torcedores estaba un pequeño perro ataviado con la camiseta verdeamarelha, pero el que llamó la atención fue un moreno que se hacia llamar Chik Jeitoso (algo así como Chic Estiloso) y autodenominado brujo, quien lucía una gran capa roja y dorada y un montón de raros collares, y realizó un trabajo
, al estilo macumba, definido como mandinga da sorte (brujería de la suerte)
.