La más reciente creación del artista visual Roger von Gunten es un objeto de arte conceptual: la caja Tres tomas de conciencia ciudadana, que contiene un cartel que dice: La potencia eleva y hace crecer/ El poder aplasta; un manifiesto, y seis cubos No.

La edición de 10 cajas –el proyecto original es de 20–, impresas por Pilar Bordes en su Taller Gráfica, fue presentada la noche del jueves en la Galería de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), donde Von Gunten explicó que con esta obra quiere expresar la diferencia entre el ejercicio del poder y de la potencia, ésta entendida como el uso de las facultades mentales de la imaginación, de la comprensión, para resolver un problema.

Como se aprecia en el cartel (un grabado en metal), el poder está simbolizado por una roca que aplasta, mientras la potencia por una pequeña semilla debajo de la piedra, que luego se desarrolla, se hace una flor o un árbol grande. Para el artista es necesario distinguir entre esos dos centros de poder, por los que cualquier persona puede actuar en cualquier momento.

Origen del proyecto

Hoy día, como hay tanta violencia, tanto ejercicio del poder, quizá vale la pena preguntar qué podemos hacer para no caer en su trampa. Lo único, creo, es tomar conciencia de que el poder en el fondo es mediocre.

La idea de la caja nació en la época en que el hijo del artista estudiaba sociología en Vancouver: Nos carteábamos sobre la diferencia entre poder y potencia, porque hablar del bien y el mal siempre es ambiguo. El bien de uno puede ser un mal para otro, pero las características del poder, de aplastar, y de semilla, de florecer, son cosas concretas, dijo en entrevista con la La Jornada.

A su vez, los seis cubos (impresos en grabado en metal) “hacen visible la palabra ‘no’ y la protesta”.

Arnoldo Kraus, colaborador de este diario, reiteró que “Roger ha tenido la fuerza de decir ‘no’ al poder, de confrontarse con él y de no vencerse ante ello”.

Si en la vida de la Tierra y en las vidas de las personas un No es todo, en la conciencia de Von Gunten un No es insuficiente. El No del artista es por supuesto distinto. Es un No que busca menguar el oprobio ejercido desde el poder y que procura fortalecer la razón de las personas.

De acuerdo con Kraus, la caja de Von Gunten es un retrato de la cotidianidad y una disección de la crisis de la humanidad. En su interior se entremezclan tristeza, realidad y esperanza. El manifiesto como muestra del desasosiego; el grabado como expresión de las fuerzas opuestas que construyen los días y que destruyen las vidas; los Seis cubos No como elemento contestatario. La caja nos recuerda que el poder deviene crisis.

Acotó: El término chino para la palabra crisis consta de dos ideogramas: uno significa dificultad; el otro, oportunidad. Lo mismo dice el juego que plantea Von Gunten. Al lado de los conflictos y de los tropiezos las crisis conllevan oportunidades y esperanzas para crear o modificar. Todo es cuestión de hacer girar los cubos y lanzar al espacio las letras N y las O hasta alcanzar las bocas de la Tierra y las conciencias de los seres humanos.

Puntos como gotas de rocío

Ya que el punto es un elemento genésico en la obra de Von Gunten, Jaime Moreno Villarreal partió de ese hecho para escribir su texto Puntos de rocío, que es aquel momento de presión y de temperatura, donde el agua evaporada se licúa y produce gotas que caen como rocío.

La periodista Silvia Cherem aseguró que no es fortuito que el artista insista en rebelarse, en protestar, reclamar y exigir justicia gritando un No contundente que se regocija en el azul sobre naranja, en el amarillo que le canta al morado, y en el rojo que baila en verde.

Von Gunten, nacido en Zurich en 1933, cuando Hitler ascendió al poder; también México ha sido la fuente de su desgracia. Desde hace un cuarto de siglo enfrenta un naufragio penal que parece no tener fin.