Después de pedir en varias ocasiones una reunión con el presidente Felipe Calderón, los padres de los niños Martín y Bryan Almanza Salazar, que resultaron muertos en un tiroteo en Tamaulipas y responsabilizan de ello a militares, viajaron a la ciudad de México para solicitar audiencia personalmente, pedir al mandatario una investigación apegada a derecho y castigo a los culpables.

En la carta que entregaron ayer en la residencia oficial de Los Pinos, consideraron que el gobierno de Calderón ha tenido una postura inhumana, negativa y anticonstitucional, ya que cuando ocurrieron los hechos, el pasado 3 de abril, funcionarios de la administración federal se refieren a éstos como un fenómeno aislado de agresión colateral.

Dijeron que mientras el gobernador de Tamaulipas, Eugenio Hernández, y el presidente municipal de Nuevo Laredo, Ramón Garza, les ofrecieron ayuda inmediata, es lamentable que sólo su esposa (de Calderón), Margarita Zavala, se haya tomado la molestia de llamar a la señora Cynthia Salazar Almanza para ofrecerle condolencias y apoyarla con dos becas para las niñas sobrevivientes, Yesenia y Jennifer.

En la misiva, suscrita por Cynthia Salazar y Martín Almanza, piden que el mandatario federal escuche directamente la petición de ordenar una investigación seria, profunda, imparcial y apegada a derecho en contra de militares responsables de la muerte de los niños Martín y Bryan, así como la infracción correspondiente para quienes resulten responsables.

El señor Almanza se preguntó en entrevista por qué Calderón visitó a los familiares de los jóvenes asesinados en Ciudad Juárez y Monterrey, y en nuestro caso, que son niños, no se ha hecho responsable ni nos ha hablado. Advirtió: No quiero venganza, nadamás lo que quiero es justicia. Que castigue a los culpables, es todo, no pido más.

El pasado primero de mayo las procuradurías de Justicia Militar, General de la República (PGR) y General de Justicia de Tamaulipas (PGJT) señalaron que la muerte de los niños Bryan y Martín Almanza Salazar fue causada por sicarios que lanzaron granadas contra soldados de un retén.

Sin embargo, el padre de los menores insistió en rebatir esta resolución, al señalar en entrevista que los soldados iban en cuatro vehículos militares y cada uno traía numeración. Los conozco, vivo en la frontera y todos los días los miro, refirió.

También pidieron ayuda para los tratamientos de rehabilitación tanto del propio Martín Almanza como de Carlos Alfredo Rangel Delgado; ambos presentan heridas por arma de fuego en las rodillas.

De acuerdo con la Constitución, la Presidencia de la República tiene un plazo 15 a 20 días hábiles para responder a esta petición, que se había hecho antes por medio de Internet y correo, según los familiares de los niños fallecidos.