La violencia en México y América Latina es un factor distorsionante que atrasa las inversiones y el crecimiento económico, aseguró el representante del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Ellis J. Juan, durante la inauguración de un seminario internacional en la Cámara de Senadores.

Durante la instalación del sexto Seminario del Foro Parlamentario Interamericano de Gestión para los Resultados en el Desarrollo, el funcionario resaltó que a México y otros países que padecen ese problema sólo les queda luchar en forma incansable contra el crimen organizado, con la finalidad de generar estabilidad económica y poder crear empleos.

En el acto, el presidente del Senado, el perredista Carlos Navarrete, resaltó que México atraviesa la peor crisis de violencia de la historia, ya que además de los miles de muertos producto de las acciones de las bandas criminales, se han presentado mecanismos más extremos de extorsión, que los delincuentes ejecutan no sólo contra ciudadanos inermes o pequeños empresarios, sino incluso contra grandes empresas aseguradoras.

Esta incertidumbre dificulta que capitales extranjeros lleguen al país y provoca que empresarios mexicanos duden de seguir invirtiendo.

Navarrete hizo un llamado a los hombres de negocios a que arriesguen y, pese a la violencia y la inseguridad, inviertan en México. Se necesita, agregó, que los empresarios mexicanos saquen la casta y el coraje.

El presidente del Foro Parlamentario Interamericano, el senador Carlos Baráibar, de Uruguay, resaltó que varios países viven la crisis financiera mundial en forma crítica.

Existe preocupación porque haya prudencia, eficacia, control adecuado de la inflación y de la moneda, así como equilibrio entre gastos y egresos, con la finalidad de lograr abatir los efectos de la recesión, sostuvo.

El diputado Porfirio Muñoz Ledo, del PT, destacó que el presupuesto y el sistema financiero determinan el programa de gobierno. Si esto no está coordinado con la participación de los congresos en los planes de desarrollo, hay una peligrosa distorsión.

Recalcó que la salida de la crisis exige una transferencia creciente de poder y responsabilidades hacia los congresos. No podemos confiar la salida de la crisis a quienes la provocaron.

El senador panista Jorge Ocejo sostuvo que los pueblos esperan que los congresos reorienten sus economías y rencaucen las políticas públicas. Demandó a los legisladores latinoamericanos dejar de hacer política para aliarse con los poderosos y aplicar los recursos en aquellos rubros que tengan impacto en el bienestar general.