Texcoco, Méx., 30 de mayo. Sólo 92 de las 200 variedades de rosas que hay en México están protegidas por los derechos de obtentor y la Unión Internacional para la Protección de Obtenciones Vegetales, lo que ha hecho a la reina de las flores objeto de la más intensa piratería, indicó José Merced Mejía Muñoz, investigador de la Universidad Autónoma Chapingo (UACh).

Añadió que la piratería causa pérdidas económicas incalculables a la producción de flores ornamentales de corte y de maceta, al evadir el pago de gravámenes por derechos de obtentor, que protegen de la competencia desleal a productores, empresas y fitomejoradores.

En México las flores ornamentales que se piratean son las más vendidas: rosas, crisantemos, gladiolas, azucenas, lilas, gerberas, claveles, tulipanes, orquídeas, anturios, calanchoes y cunas de Moisés, refirió. De las 200 variedades de rosas nativas, 20 son las más importantes del mercado.

Según Mejía Muñoz, el estado de México produce 80 por ciento de las rosas del país.

Además, en territorio nacional hay 600 variedades de plantas ornamentales, de las cuales 120 son de corte y follaje. El resto son de maceta y vivero.

Entre las especies protegidas por derechos están algunas variedades de rosa, jerbera, alstroemeria, anturio, azucena, lila, buganvilia, clavel, hipsofilo, limonio, cempasúchil, especrelia, trigridia, dalia, echeveria y nochebuena.

La UACh participa en la Unión Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales y supervisa las guías técnicas de rosas, dalias, nochebuenas, cempasúchil, trigidia y espequelia.

Recientemente se registró la dalia Miriam de San Luis, una de las cuatro variedades cultivadas por la UACh, así como seis variedades de nochebuena y cempasúchil, detalló el investigador.