Lunes 7 de junio de 2010, p. 26
Castigo colectivo
es el concepto que desde 2008 utilizó la Organización de Naciones Unidas (ONU) para describir los efectos del bloqueo marítimo, aéreo y terrestre impuesto por Israel a la franja de Gaza, con el argumento de que el movimiento de resistencia islámica Hamas utilizaba la ayuda humanitaria para importar materiales que transformaba en cohetes de fabricación artesanal de alcance menor a 10 kilómetros que amenazan su seguridad.
Entendemos los problemas de seguridad y la necesidad de responder a eso, pero creemos que el castigo colectivo al pueblo de Gaza (millón y medio de habitantes) no es la manera apropiada de hacerlo
, manifestó John Holmes, subsecretario general de la ONU para Asuntos Humanitarios.
El bloqueo en 2007 reforzó las medidas restrictivas establecidas por Israel en reacción al levantamiento palestino (Intifada) de 2000.
De entonces a la fecha, el gobierno israelí ha evitado publicar una lista concreta de los bienes cuyo ingreso está prohibido para Gaza. Tel Aviv sostiene que las decisiones sobre las importaciones al territorio palestino se toman caso por caso, pero en estos años se ha logrado conocer un listado de lo que generalmente detienen los militares israelíes en los puntos de acceso a la franja.
Un reporte publicado este año por la BBC, basado en información de un proceso judicial en Israel, reveló que mermelada, chocolate, jugo de frutas, madera para fabricar muebles, textiles y juguetes de plástico están dentro del documento. La investigación halló que uno de los criterios es el consumo diario de calorías y que la cantidad de artículos bajó de 4 mil a 81 entre 2007 y 2010.
También se prohibió hace tiempo la importación de lápices para las escuelas del territorio palestino. Las autoridades israelíes consideran que el plomo de los lápices puede ser utilizado para la fabricación de armas.
El bloqueo ha generado, por otro lado, dependencia a la ayuda de la ONU para más de la mitad de la población de la franja de Gaza y un mercado negro de abasto mediante túneles en el límite con Egipto, que de acuerdo con el diario británico The Independent beneficia principalmente a las elites de Hamas.