Nueva York, 9 de junio. El Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) aprobó hoy por amplia mayoría nuevas sanciones contra Irán, con el objetivo de que suspenda el enriquecimiento de uranio, e insistió en la necesidad de encontrar un acuerdo con Teherán por la vía del diálogo.

La república islámica, que rechaza las acusaciones de Estados Unidos y sus aliados de que su programa nuclear tiene fines militares, sostuvo que la resolución carece de valor y afirmó que continuará enriqueciendo uranio.

La resolución de hoy, la 1929, llega tras meses de negociaciones entre los cinco miembros permanentes de ese mecanismo (Estados Unidos, Rusia, China, Francia y Reino Unido) y Alemania con Irán para lograr a un acuerdo sobre las nuevas sanciones, que triplican las anteriormente impuestas.

El texto impulsado por Estados Unidos tuvo el respaldo de 12 de los 15 miembros del consejo; Brasil y Turquía votaron en contra y Líbano se abstuvo.

El presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, calificó de victoria pírrica la aprobación de la resolución, luego que él y Turquía lograron un acuerdo con Irán para evitar el castigo a la nación islámica, y aseguró que las sanciones demeritan al Consejo de Seguridad. Estados Unidos dijo comprender la oposición de Brasilia y Ankara a la resolución.

Los que votaron a favor fueron, junto con los cinco permanentes, siete de los 10 no permanentes: Austria, Japón, México, Uganda, Bosnia, Gabón y Nigeria. Se trata de la cuarta ronda de sanciones que el consejo adopta contra Irán desde 2006.

Una solución negociada

Tras la votación, el embajador británico, Mark Lyall Grant, leyó un comunicado en nombre de los ministros de Exteriores de Estados Unidos, Reino Unido, Francia, China, Rusia y Alemania, en el que reafirmaron su determinación y compromiso para buscar una pronta solución negociada sobre el programa nuclear iraní.

La embajadora de Estados Unidos, Susan Rice, reafirmó el compromiso del presidente Barack Obama de usar la diplomacia y dijo que la resolución no remplaza buscar la vía del diálogo.

Obama declaró que las sanciones envían el mensaje inequívoco de que el mundo no permitirá a Irán desarrollar armas nucleares. La secretaria de Estado, Hillary Clinton, afirmó que las nuevas medidas de presión obstaculizarán las ambiciones nucleares de Irán, a las que, dijo, se opone la comunidad internacional.

México afirmó que las sanciones no son incompatibles con una solución diplomática. Están enfocadas en actividades de proliferación nuclear y son perfectamente reversibles si Irán cumple con las solicitudes del Consejo de Seguridad, dijo el embajador mexicano ante la ONU, Claude Heller.

Los miembros del consejo también reconocieron los esfuerzos de Brasil y Turquía en buscar una vía negociada al diferendo nuclear con Irán. La embajadora de Brasil ante la ONU, María Luiza Ribeiro Viotti, advirtió que las nuevas sanciones podrían tener consecuencias trágicas, como fue el caso, según dijo, en Irak.

Lula aseveró que las sanciones son una equivocación causada por la terquedad de los países del Consejo de Seguridad. En vez de llamar a Irán a la mesa de negociaciones decidieron, en mi opinión sólo por terquedad, mantener las sanciones, que terminarán por no tener implicación para Irán.

Es un episodio que debilita el Consejo de Seguridad. El Consejo de Seguridad representa la misma correlación de fuerzas que en 1948 cuando fue creado, se quejó el jefe de Estado de Brasil.

Agregó: Sinceramente, espero que (Mahmud) Ahmadinejad permanezca tranquilo. Conversé mucho con el primer ministro de Turquía y decidimos votar contra las sanciones a Irán porque tenemos nuestro nombre en un acuerdo.

Creo que nosotros debemos tener paciencia cuando constatamos lo obvio. Brasil y Turquía hicieron lo que los países del consejo no conseguían hacer: llevar a Irán a la mesa de negociación. Al contrario, ellos resolvieron, en mi opinión por capricho, mantener las sanciones que no van a tener efecto sobre Irán, insistió.

Lula firmó el 17 de mayo en Teherán un acuerdo tripartito junto con Turquía, que prevé que el uranio iraní ligeramente enriquecido sea enviado a territorio turco para su enriquecimiento y conversión en combustible para un reactor nuclear de investigación en Irán.

Por su parte, el embajador iraní ante la ONU, Mohammad Khazee, calificó las sanciones de acciones hostiles y dijo que Irán no va a ceder ante ellas. Enfatizó que su país continuará con su determinación de defender sus derechos legales e inalienables.

Ahmadinejad señaló que la nueva resolución no vale un céntimo para su país y la describió como un pañuelo usado que debería ir a parar a un bote de basura.

En Viena, el embajador iraní ante la Agencia Internacional de Energía Atómica, Ali Asghar Soltanieh, sostuvo que las actividades de enriquecimiento no se suspenderán ni por un segundo... No importa cuántas resoluciones se aprueben, continuaremos con el enriquecimiento de uranio.