Pretoria, 16 de junio. Uruguay derrotó 3-0 a Sudáfrica con un doblete de Diego Forlán y quedó a un paso de la clasificación a los octavos del Mundial. Fue muy superior a los anfitriones y consiguió su primera victoria del certamen.

Forlán fue la gran estrella. Anotó a los 24 y 80 minutos, éste penal. En la compensación, Álvaro Pereira aumentó la diferencia (95). Uruguay necesitará apenas un empate contra México para confirmar su acceso a los mejores 16.

Por su parte, los Bafana Bafana dependerán de una serie de resultados para seguir con vida. Sus aficionados emprendieron una triste salida antes de que terminara el duelo.

Uruguay modificó su sistema respecto del empate contra Francia. El ingreso de Fucile recuperó la línea de cuatro defensores, mientras la presencia de Cavani, una de las figuras del Palermo, obligó a Forlán a retrasarse y cumplir de mediapunta.

Por su lado, el brasileño Parreira repitió el 11 inicial que enfrentó a México.

Ante la diferencia de calidad del rival, los charrúas encontraron mayores espacios y adelantaron sus líneas sin tener que cuidar demasiado los contragolpes rivales; sin embargo, en el primer cuarto de hora tuvieron problemas en la distribución de pases.

Un tiro libre de Forlán que murió en la barrera sudafricana y un disparo aislado de Fucile parecían condimentar un partido destinado al juego trabado y a las imprecisiones.

El más temible charrúa se encargó de romper el cero. Forlán controló el balón a unos 30 metros de la portería y lanzó un violento disparo. La pelota se desvió apenas en la espalda del capitán sudafricano Aaron Mokoena y se coló en el arco por detrás de Itumeleng Khune, antes de pegar en el travesaño.

A partir del gol, Uruguay controló el juego. La línea defensiva congenió con los centrocampistas y Forlán fue un dolor de cabeza cada vez que tocaba el balón.

Durante la segunda mitad, Sudáfrica decidió arriesgar y abandonó la doble línea defensiva en la búsqueda del empate, pero la mayoría de sus ataques fueron centros que no generaron demasiados problemas.

Un cabezazo de Mphela apenas desviado y un disparo lejano de Modise, que controló Muslera, fueron los únicos llamados de atención.

Más tarde llegó el penal que definió la historia: Luis Suárez controló la pelota en posición dudosa y fue derribado por Khune con una falta de último recurso. El árbitro Busacca decretó la pena máxima y expulsó al guardameta. Así, Forlán sentenció el duelo con un trallazo que dejó sin opción al recién ingresado Moneeb Josephs.

En tiempo de descuento, Álvaro Pereira transformó la victoria en goleada con un cabezazo al fondo de la red casi en la línea de la portería.

Uruguay no ganaba en la copa desde hace 20 años, en Italia 90. No participó en Estados Unidos 94 ni Francia 98; lo hizo en 2002, pero quedó fuera en Alemania 2006.