El gobierno federal busca tomar por asalto la presidencia de la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) para recuperar el control de los medios de comunicación, advirtió el ex comisionado Gerardo Soria.

Destacó que la renuncia de Héctor Osuna Jaime a la presidencia de la institución fue producto de presiones del Ejecutivo y que en los próximos días también podrían renunciar los comisionados Ernesto Gil Elorduy y José Luis Peralta, con lo que la Presidencia de la República podría proponer a tres nuevos comisionados a modo, que actuarían como operadores políticos aunque no sepan de telecomunicaciones.

De conseguirlo el Ejecutivo tendría un pleno a modo, debido a que los comisionados Gonzalo Martínez Pous y Rafael del Villar son afines a la actual administración, aseguró el especialista en telecomunicaciones, y enfatizó que no es válido que un gobierno y su partido desmantelen instituciones, como la Cofetel, por intereses políticos.

El miércoles pasado el hasta ayer presidente de la Cofetel, Héctor Osuna, anunció que una vez concluido su periodo no continuará como comisionado los cuatro años más a los que tenía derecho, argumentado intereses personales.

Este anuncio no impedía que los cuatro comisionados que continúan en la Cofetel eligieran entre ellos mismos al nuevo presidente, no era necesario que conocieran la propuesta del jefe del Ejecutivo, y así llegar al 27 de junio con una nueva cabeza al frente del pleno; sin embargo, el día de su renuncia Osuna informó que les sugeriría a los comisionados que esperaran la designación de Felipe Calderón, y así ocurrió.

Lo que está ocurriendo en la Cofetel, explicó Gerardo Soria, es lo que se quiso evitar con la última reforma a la Ley Federal de Radio y Televisión, con la que se buscaba tener un órgano regulador autónomo, con comisionados transexenales e inamovibles y en la que los intereses políticos no influyeran arbitrariamente en la función de los medios.

Detalló que durante la reforma a la llamada ley Televisa el Partido Acción Nacional estaba con el Jesús en la boca porque pensaban que Andrés Manuel López Obrador iba a ganar las elecciones y había que evitar que como presidente pudiera intervenir en los medios; por eso los panistas querían un órgano autónomo en el que se concentraran todas las atribuciones para radio, televisión y telecomunicaciones, pero desde que Felipe Calderón llegó a la Presidencia la Secretaría de Comunicaciones y Transportes ha tratado por todas las vías de recuperar el control de los medios.

Soria advirtió que “la Presidencia de la República quiere tomar por asalto la Cofetel. Felipe Calderón está haciendo lo que el PAN temía que hiciera cualquier otro en el poder, presionó a Osuna hasta que ya no aguantó y ahora lo hace con los comisionados Ernesto Gil Elorduy y José Luis Peralta para que acaben por renunciar, y entonces va a meter a tres personas azules, aunque no sepan nada de telecomunicaciones, pero que van a ser operadores políticos con miras a las elecciones de 2012”.

El ex comisionado señaló que en los pasados tres años el Ejecutivo ha tratado de imponerse en la Cofetel porque los permisos y concesiones para radiodifusores, así como operadores de telecomunicaciones, son una buena herramienta de control político. El último intento fue tratar de imponer un nuevo reglamento de la SCT, que redactó el entonces jurídico de la dependencia, Gonzalo Martínez Pous, ahora comisionado, con el que se pretendía quitar a la Cofetel las atribuciones sobre radio y televisión, documento que la Suprema Corte de Justicia de la Nación declaró inconstitucional.

Soria destacó que es indispensable que la Cofetel se mantenga como un regulador autónomo, mientras esta semana sigue el polémico proceso de licitación de espectro en las frecuencias de 1.7 y 1.9 gigahertz para servicios de telecomunicaciones.