El presidente Felipe Calderón Hinojosa debe resolver la crisis de credibilidad del gobierno; hay mexicanos que piensan que padece una enfermedad: sordera presidencial, señaló Manuel Espino Barrientos, presidente de la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA). No sólo, dijo, debe convocar al diálogo a los que dicen sí señor, sino a las voces disidentes como la de Andrés Manuel López Obrador.

En conferencia de prensa dijo que el mandatario convoca a la unidad, pero en ocasiones arremete, él o su gobierno, contra instituciones que quieren colaborar, y se refirió a que, como dirigente del PAN cuando fueron las elecciones de 2006, es corresponsable de que Felipe Calderón sea el presidente de la República.

El panista, que en diversas ocasiones ha demandado al jefe del Ejecutivo un cambio en la estrategia de combate a la delincuencia organizada, informó que ayer mismo le envió una carta en la que le solicita restablecer el diálogo con él, cancelado unilateralmente desde el gobierno. En ese documento también le señaló que este discurso de unidad, que es el correcto, no siempre ha sido acompañado de la actitud correcta de su gobierno. Mientras dicha actitud no se corresponda con hechos, no será percibida sincera y la palabra presidencial quedará en soliloquio.

En relación con la convocatoria a un diálogo nacional, dijo que cuando se le ha dicho al Presidente que analice la estrategia los ha llamado ingenuos. Agregó que convoca a la unidad, pero en ocasiones arremete, él o su gobierno, contra instituciones que quieren colaborar, y se refirió a las declaraciones del secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, quien llamó tontos útiles a las comisiones de derechos humanos, así como la recriminación a empresarios o alcaldes. Ésta no es la actitud de un estadista o de alguien que convoca a la unidad y al diálogo, precisó.

Abundó en que cuando se insiste en el diálogo, lo que se hace es invitar “a la mesa a los que dicen ‘sí señor’ y no a los que tienen algún disenso o una propuesta diferente”. El diálogo tiene que ser incluyente e incorporar voces opositoras, dijo, al considerar que quizá sea este el momento más difícil en lo que va del sexenio.

Ante la pregunta de si en ese diálogo debería participar López Obrador, dijo que Felipe Calderón Hinojosa está obligado a convocar a esos actores políticos, que tienen liderazgo, experiencia. Si hay segregación se pierde la credibilidad de ese discurso. Dijo que Andrés Manuel López Obrador debe ser invitado y que éste no debe poner condiciones.

El Presidente, dijo, debe resolver la crisis de credibilidad que tiene el gobierno mexicano. Se debe reconocer que muchos mexicanos tienen convicción de que el Estado padece una enfermedad: sordera presidencial. Para que el mandatario escuche y atienda acuerdos, el discurso debe acompañarse de una primera actitud: intención.

Señaló que es lamentable la muerte del candidato a gobernador de Tamaulipas, Rodolfo Torre. “Entiendo el reclamo del tricolor, pero espero que haya una actitud serena.” Sobre lo dicho por la dirigente priísta, Beatriz Paredes, de que su partido hizo quórum para que Calderón rindiera protesta, dijo que el PRI tenía el deber, no hacía favor a nadie... no tenemos por qué agradecerles cuando cumplen con su deber.