Apareció colgado el cuerpo del jefe de custodios de la penitenciaría estatal de San Guillermo
De los asesinatos, al menos 12 ocurrieron en Ciudad Juárez; cuatro más, en Guerrero
Lunes 5 de julio de 2010, p. 15
Cuatro cuerpos, entre ellos el del jefe de custodios de la penitenciaría estatal de San Guillermo, Juan Scott –levantado la víspera– pendían la madrugada de ayer en tres puentes viales de la capital de Chihuahua.
El gobernador José Reyes Baeza Terrazas confirmó la ejecución de Scott, pero descartó que los cuatro crímenes y la forma en que fueron exhibidos los cadáveres conlleve un mensaje del crimen organizado en la coyuntura electoral.
Incluyendo las anteriores, fueron al menos 23 las ejecuciones reportadas ayer en la entidad, que incluyen las de seis hombres baleados y torturados, cuyos cuerpos aparecieron a mediodía cerca de Estación Horcasitas, junto a la autopista Chihuahua-Delicias, a unos 15 kilómetros de la capital.
En el mismo paraje ya hubo asesinatos previos, y esta vez conductores que vieron los seis cuerpos apilados encima de un charco de sangre avisaron a la Policía Ministerial.
A Ciudad Juárez correspondieron al menos 12 de las muertes, que incluyen la de una mujer calcinada y otras cuatro producidas en un solo atentado a balazos contra dos personas que se hallaban dentro de un taller mecánico de tractocamiones, y dos que aguardaban afuera, a bordo de una camioneta pick up Ranger.
En la misma localidad sicarios ultimaron a tres individuos en la colonia Infonavit Mil Cumbres, y en medio del fuego indiscriminado también pereció un anciano de 90 años.
Conforme a los reportes oficiales, el total de víctimas ascendió a 36, pues hubo 13 más también atribuidas al crimen organizado en otras entidades.
Entre estas últimas, un hombre apareció sin vida, encobijado y sujeto con alambre de pies y manos en la periferia de Morelia, Michoacán, y otro fue ultimado en la tenencia de Guacamayas, del municipio de Lázaro Cárdenas.
Cuatro más de las ejecuciones ocurrieron en Guerrero. En dos, los ahora occisos vestían ropa militar, portaban chalecos tácticos y fueron abatidos dentro de una camioneta Courier con placas del Distrito Federal, cuando el comando uniformado atacó dos presuntas casas de seguridad el sábado en la comunidad de Villa Hidalgo, municipio de San Miguel Totolapan.
De los demás asesinatos tres ocurrieron en Sinaloa y tres más en Sonora, entre ellos el del policía estatal Arnoldo Quintero Alcántar, en el kilómetro 42 de la carretera Cananea-Agua Prieta.
La restante víctima, un hombre a quien acompañaba un mensaje dirigido por sus ejecutores a Sergio Villarreal, El Grande, apareció embolsado en la colonia Satélite de Cuernavaca, Morelos.