Los puentes internacionales de Tamaulipas y Nuevo León fueron cerrados este miércoles, pues los remanentes del huracán Álex propiciaron una crecida en el río Bravo, que según el presidente municipal de Nuevo Laredo, Tamaulipas, Ramón Garza Barrios, alcanzará una altura de 13 metros.

El gobernador Eugenio Hernández Flores previó que las inundaciones por la crecida del Bravo serán más graves de lo que anunció la Comisión Nacional del Agua (Conagua), dependencia a la que calificó de irresponsable porque no desfogó las presas con antelación.

Durante una reunión en Ciudad Victoria, encabezada por el gobernador y en la cual participaron funcionarios estatales y federales, se informó que la zona crítica por la crecida del Bravo abarca los municipios fronterizos de Nuevo Laredo, Miguel Alemán, Díaz Ordaz, Reynosa, Río Bravo, Valle Hermoso y Matamoros.

Roberto Shuldes Dávila, gerente regional de la Conagua, explicó que el incremento del Bravo en Nuevo Laredo se debió a que el cauce llevaba 3 mil metros cúbicos por segundo más de lo normal, por la derivación de agua de la presa La Amistad, y por escurrimientos de los ríos San Rodrigo, Las Vacas y San Diego, en Coahuila.

Luego de una evaluación entre las autoridades de Estados Unidos y de los tres órdenes de gobierno en México para coordinar esfuerzos, hemos llegado a la conclusión de cerrar el puente internacional número uno a partir de las 11 de la mañana de hoy (miércoles) para garantizar la seguridad de los ciudadanos, dijo el alcalde Garza Barrios.

El presidente municipal previó que el agua rebasará el puente internacional número uno, el cual mide 10.29 metros, mientras el puente 2 tiene 14.87 metros de alto, por lo que está fuera de la contingencia, al igual que el puente 3, que tiene 19.02 metros.

El cierre fue sólo del lado mexicano, en el cruce Reynosa-Hidalgo. A partir de las 18 horas del miércoles se cerró el puente internacional Colombia, en Anáhuac, Nuevo León.