Querétaro, Qro., 9 de julio. Seis de diez diputados de la fracción del Partido Acción Nacional (PAN) en la legislatura local demandaron fijar su posicionamiento durante el primer informe del gobernador priísta, José Calzada Rovirosa. Los restantes cuatro se les oponen, junto con legisladores de otras bancadas y funcionarios estatales.

Ricardo Anaya Cortés, líder estatal y diputado local del PAN, así como Enrique Bolaño Mendoza, coordinador de su fracción, rechazaron el formato aprobado por la mesa directiva y la Junta de Concertación Política de la 56 Legislatura, encabezadas respectivamente por la priísta Dalia Xochitl Garrido y el militante de convergencia José Luis Aguilera Rico.

La mesa directiva dispuso que ningún coordinador emita opinión o posicionamiento, y que sólo haya unas palabras protocolares a cargo de Garrido.

Sin embargo, Anaya y Bolaño dijeron que tal acuerdo implica un retroceso a la vida democrática del estado pues en los informes del anterior gobernador panista, Francisco Garrido Patrón, se permitía intervenir a los jefes de bancada.

Ley mordaza

Ambos dirigentes panistas indicaron que el formato adoptado es como una ley mordaza; sin embargo, sus correligionarios y diputados Gerardo Cuanalo, Salvador Martínez, Pablo Ademir Castellanos y María García los instaron a respetar las decisiones tomadas en la Junta de Concertación Política.

Bolaño Mendoza dijo que un acuerdo tomado en la junta y firmado por él estipula que Calzada Rovirosa entregue su informe por escrito y rinda un breve mensaje pero no que los coordinadores guarden silencio.

El subsecretario de Desarrollo Político y Social del estado, el priísta José Hugo Cabrera Ruiz, criticó al dirigente y al coordinador panistas por avalar el formato y luego inconformarse.

Somos respetuosos de los desacuerdos en Acción Nacional pero exigimos que no se pretenda supeditar a la legislatura y al gobierno estatal a proble-máticas internas, dijo en un comunicado.