El nuevo secretario de Gobernación, José Francisco Blake Mora, fue operador político del gobernador de Baja California, el panista José Guadalupe Osuna Millán, que en las pasadas elecciones perdió todos los municipios en su estado.

La amistad cultivada por Blake con Calderón durante una década le valió recibir una invitación del michoacano para integrarse a la Oficina de la Presidencia. En círculos del estado se explica que ésta fue declinada porque prefirió integrarse como coordinador general de la campaña de Osuna Millán y después como secretario general de Gobierno, cargo que ocupó hasta ayer.

Tijuanense egresado de la Escuela de Derecho de la Universidad Autónoma de Baja California, es consejero nacional del PAN, aunque en ese partido es poco conocido. No hay mucho que decir, porque no hay mucho que destacar en su trayectoria, comentó un ex integrante del Comité Ejecutivo Nacional.

La carrera de Blake ha estado vinculada a la de Osuna Millán. Fue regidor durante el trienio en que el actual gobernador fue alcalde de Tijuana. En círculos locales se dice que es el poder tras el trono.

Se le ubica en el grupo de Los Rojos, integrado por el ex presidente de la Comisión Federal de Telecomunicaciones y ex senador Héctor Osuna Jaime; la oficial mayor de la administración estatal y ex diputada federal Ruth Hernández; el propio Osuna Millán, y el secretario de elecciones del PAN y ex diputado federal y local, Cuauhtémoc Cardona Benavides.

De 2000 a 2003 fue diputado federal y compañero de curul de Felipe Calderón. En esa legislatura fue uno de los cuatro integrantes de la sección instructora que analizó la solicitud de desafuero contra Ricardo Aldana y Romero Deschamps por el llamado Pemexgate. Esa comisión determinó que procedía el desafuero de ambos dirigentes del sindicato petrolero, pero no se presentó al pleno al agotarse el periodo ordinario de sesiones, y legaron el asunto a la siguiente legislatura.

En 2006 fue coordinador general de campaña de Calderón Hinojosa en Baja California. En febrero de 2009 recibió otra invitación para encabezar la Procuraduría General de la República, pero aplazó su aceptación hasta que concluyera el proceso electoral federal.

La propuesta fue rechazada en el Congreso de la Unión por los senadores Fernando Castro Trenti, del PRI, y Alejandro González Alcocer, del PAN, de acuerdo con fuentes consultadas.

En 2007 y 2009 los panistas obtuvieron carro completo en la elección federal, mientras en 2010 perdieron los cinco municipios y la mayoría en el Congreso estatal, lo que provocó que algunos militantes panistas exigieran su renuncia. El gobernador lo defendió con el argumento de que no se le podía endosar la factura de la derrota.