La Universidad Autónoma Metropolitana, unidad Iztapalapa (UAM-I), inauguró ayer un sistema de calentamiento solar para las duchas de los vestidores de hombres, en la zona deportiva del plantel, que forma parte de una estrategia integral para alcanzar su plena autosustentabilidad ecológica.

Constituido por 40 celdas solares, es la segunda instalación con energía no contaminante, ya que hace unos meses se inauguró una planta de generación de electricidad, que cubre 80 por ciento de las necesidades de una planta de aulas y oficinas.

La energía generada por la radiación solar –que se capta durante todo el día, aun cuando esté nublado– calienta el agua hasta 55 grados centígrados. Después, ésta es almacenada en dos tanques de dos mil 500 litros cada uno, construidos con fibra de vidrio y aluminio, para mantenerla a buena temperatura en cualquier momento.

Utilizar este sistema permitirá a la universidad ahorrar hasta 80 por ciento del gas LP que emplea todos los días en dicha área, lo cual equivale a 90 mil pesos al año, además de evitar la emisión de más de 20 toneladas de CO_² a la atmósfera, explicó el doctor Juan José Ambriz García, jefe del departamento de ingeniería de procesos e hidráulica de la UAM-I y responsable del proyecto.

Poco uso masivo

A pesar de su efectividad, la energía alternativa no se ha aplicado lo suficiente en México, en gran medida porque la mayoría de la gente no la conoce y desconfía de ella.

Otros factores son la falta de empresas que ofrezcan el servicio, y que la instalación de un calentador solar para una familia cuesta alrededor de 10 mil pesos, cuando un tanque de gas cuesta la quinta parte.

Sin embargo, la inversión inicial se recupera en unos tres años y medio, y a partir de ese momento se puede contar con agua caliente para bañarse 20 años más sin gastar un solo peso extra, lo cual genera un ahorro de gas hasta de 60 por ciento.