El español aprovechó una falla técnica de Schleck para rebasarlo
Martes 20 de julio de 2010, p. a15
Luchon, Francia, 19 de julio. El francés Thomas Voeckler (Bbox) ganó en solitario el lunes la decimoquinta etapa del Tour de Francia, en la segunda jornada en los Pirineos, con meta en Luchon, donde el español Alberto Contador (Astana) arrebató el liderato general al luxemburgués Andy Schleck.
Contador, de 27 años, ahora manda con ocho segundos de ventaja sobre Schleck (Saxo Bank), quien perdió tiempo debido a un problema con la cadena de su bicicleta cuando había logrado despegarse de Contador en el último puerto de la etapa, a unos 25 kilómetros de la meta.
Voeckler superó por más de un minuto al italiano Alessandro Ballan y al español Aitor Pérez, dos de sus ex compañeros de fuga inicial, aunque la adrenalina de la etapa se la llevó la secuencia de ataque de Schleck en la montaña y la reacción de Contador frente al problema técnico de su rival.
Contador, defensor del título, se vistió de amarillo por primera vez este año, aunque necesitó de la pequeña ayuda del incidente que demoró a Schleck.
De hecho, al español, doble ganador de la prueba, lo tomó por sorpresa la aceleración que realizó el luxemburgués en el último kilómetro de ascenso, tras una subida de 19.3 kilómetros en el Port de Bales, pero el problema con su cadena le permitió alcanzarlo y luego rebasarlo.
Allí, Contador redujo los 31 segundos que lo separaban al comienzo del día, antes de los 187.5 kilómetros de recorrido.
El español llegó a la cima con unos 20 segundos de ventaja sobre Schleck, uniéndose en la bajada al ruso Denis Menchov y a su compatriota Samuel Sánchez, para acabar con 39 segundos de ventaja sobre el líder del Saxo Bank.
Cuando se celebraba la ceremonia de premiación muchos aficionados silbaron a Contador en el momento que le fue colocado el suéter de líder.
El hispano comentó: Cuando ataqué no sabía lo que le sucedía a Schleck. Hay gente que entiende y otra que no. No tenía dudas de que habría polémica
.
En tanto, Schleck dijo estar motivado y afectado por la actitud de sus rivales, que se aprovecharon de un problema técnico.
“Alguno no va a ganar hoy el premio al juego limpio, pero no voy a llorar porque perdí el maillot. El Tour no ha terminado todavía, tengo hormigas en las piernas. Una escena así me motiva para la llegada al Tourmalet”, agregó.
El martes se disputa la decimosexta etapa entre Bagneres de Luchon y Pau, con un trayecto de 199.5 kilómetros.