Miércoles 21 de julio de 2010, p. 10
Colocar a Maximiliano Cortázar como vocero del PAN “representa la confesión más burda del gobierno federal de que impulsó una vigorosa campaña publicitaria –pagada con dinero público– para favorecer a su partido en el pasado proceso electoral”, señalaron diputados de PRI y PRD.
Mauricio Toledo, representante del sol azteca, consideró que si la estrategia del gobierno calderonista apunta a hacerse del control total del PAN con miras a los comicios de 2012, “incurre en un grave error, porque durante cuatro años Cortázar fue incapaz de elaborar una estrategia mediática que le granjeara respaldo popular a su jefe Felipe Calderón.
No se puede pedir a un ex baterista del grupo Timbiriche que tenga la capacidad intelectual y política para formular una campaña que salve al PAN del ostracismo en que se encuentra. Con este nombramiento Calderón manifiesta dos cosas: no deja caer en desgracia a sus amigos y por esa parte es leal, y a la par incurre en un error garrafal al pretender que un ignorante, con ínfulas de conocedor del sistema político mexicano, recomponga la deteriorada imagen del panismo en el país
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César Augusto Santiago, presidente de la Comisión de Gobernación de la Cámara de Diputados, acusó a la administración federal de reconocer implícitamente, con el nombramiento de Cortázar, que más que gobierno se ha convertido en partido gobernante, y ahora manda descaradamente a un compinche a operar en materia mediática, y sinceramente espero que no sea con dinero público
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El priísta consideró que si Calderón y su partido requieren de un salvamento, éste no sería estrictamente publicitario, sino de principios, normas y valores, ya que se encuentra muy abandonado.