Debemos aceptar que vender restos paleontológicos es una realidad, señala experta
Sotheby’s espera captar el interés de acaudalados coleccionistas a finales de año en París
Martes 27 de julio de 2010, p. 5
Londres. Posee impresionantes mandíbulas, está en una condición espectacular para su edad y sería una impactante adición para la sala de cualquier residencia… siempre y cuando sea lo bastante grande para contener sus 10 metros de huesos fosilizados.
Quien tenga una billetera en verdad robusta podrá pronto adquirir este raro esqueleto, parcialmente fosilizado, de un alosaurio hembra, dinosaurio carnívoro que vivió hace unos 150 millones de años y al que a veces se le llama el tiranosaurio rex del periodo jurásico, pues el rex vivió más bien en el cretácico, que es posterior.
El alosaurio hembra, descubierto en un cementerio fósil del estado de Wyoming (Estados Unidos), es uno de los primeros artículos que saldrán a la venta a finales de este año en la sucursal francesa de la casa de subastas Sotheby’s, en París. Se espera que atraiga fuerte interés del creciente número de acaudalados coleccionistas de fósiles, ansiosos por hacerse con uno de los hallazgos más raros entre los dinosaurios.
Otro artículo en venta es un reptil carnívoro volador cuyas alas extendidas miden 87.5 centímetros, llamado Dorygnathus banthesis, desplegado en la roca matriz original donde fue encontrado en 1932, en Holzmaden, Alemania. Sotheby’s calcula que este pterosaurio de cráneo oval obtendrá entre 210 mil y 325 mil dólares.
Si ninguna de estas bestias le atrae, qué tal un esqueleto completo de un plesiosaurio, especie de lagarto marino que se alimentaba de peces y que vivió hace 190 millones de años. Fue sacado de un afloramiento de piedra caliza en Blockley, Gloucestershire (Inglaterra), a principios de la década de 1990. Sotheby’s afirma que este esqueleto de 2 x 2.80 m es el espécimen de plesiosaurio mejor preservado que se ha hallado hasta la fecha, por lo cual alcanzaría un precio de 462 mil dólares.
Para quienes no les agrada la idea de llevarse un temible carnívoro a casa, existe la alternativa de adquirir un par de cangrejos petrificados que quedaron sepultados de pronto en Vicenza, Italia, hace 45 millones de años. Otra opción es una hoja fosilizada de palmera, acompañada de unos peces, que data del periodo eoceno, hace unos 50 millones de años, unos 15 millones de años después de la extinción de los dinosaurios pero antes de que los mamíferos sentaran sus reales sobre la Tierra.
Ya se miren como obras maestras artísticas o como maravillas de la naturaleza, los esqueletos de dinosaurios, fósiles y minerales dan cuenta de la saga de la evolución, en especial de los poderosos animales terrestres y marinos hoy extintos
, comentó el paleontólogo Eric Mickeler, consultor de la subasta de Sotheby’s.
Sean cuales fueren los motivos de quienes quieran poseer uno de esos magníficos especimenes, está claro que coleccionar y comerciar reliquias fósiles es un gran negocio, según Lorraine Cornish, conservadora del Museo de Historia Natural de Londres, quien participa en la adquisición de fósiles para esa institución.
Tratamos de no comprar en el mercado comercial. Para empezar, nuestros fondos son limitados, pero tampoco queremos alentar la venta de fósiles que podrían haber sido desenterrados sin que se documenten los detalles del hallazgo, lo cual significaría la pérdida de importante información científica
, apunta Cornish.
“Sin embargo –agrega–, tenemos que aceptar que el comercio de fósiles es una realidad. Algunas personas muy ricas son apasionadas de los fósiles y quieren los mejores, así como hay quienes quieren las mejoras obras de arte.”
En Gran Bretaña es legal coleccionar y comerciar fósiles de dinosaurios u otros animales prehistóricos, siempre y cuando se cumplan ciertas normas, como tener la aprobación del propietario del terreno y obtener permiso de las autoridades si la zona está protegida por la ley. Se deben llevar registros detallados y realizar la excavación con el cuidado debido.
Algunos de los hallazgos más importantes han sido hechos por coleccionistas aficionados y profesionales. Uno de ellos, Stan Wood, desenterró el fósil de reptil más antiguo conocido, cerca de Bathgate, en West Lothian.
El fósil de 20 centímetros de largo, conocido como Lizzie, fue vendido más tarde a los Museos Nacionales de Escocia en el equivalente a 270 mil dólares, considerablemente menos de lo que Wood pudo haber recibido si lo hubiera vendido a coleccionistas extranjeros, según Matt Dale, comerciante en fósiles de Edimburgo que ahora maneja el negocio de fósiles de Wood.
© The Independent
Traducción: Jorge Anaya