Salzburgo, 27 de julio. El actor austriaco Klaus Maria Brandauer fue aclamado la noche del lunes en el estreno de Edipo en Colono, de Sofócles, durante la edición 90 del festival de música y teatro de mayor fama mundial, en la ciudad natal de Wolfgang Amadeus Mozart.

Numerosos ¡bravos! se escucharon y una fuerte ovación con el público de pie para esta obra en la que Brandauer encarna un Edipo ciego, quien tras matar al padre y haberse acostado con la madre deambula en el exilio a la espera de la muerte con la única lealtad de su hija Antígona. En lugar de centrarse en la vida, la obra lo hace en la muerte de los repudiados, de los que ya no esperan nada.

El montaje fue todo un éxito, pero la estrella de la velada fue el excepcional Klaus Maria Brandauer, quien durante casi tres horas encarna a un personaje de escasa movilidad, pero rico en matices. Maneja un larguísimo texto en forma tan precisa como repleta de energía.

El deslumbrante actor comenzó su carrera en el teatro, aunque a escala internacional es más reconocido por su trabajo en cine, donde en 1981 debutó en la película Mephisto, del director húngaro Istvan Szabó, que ganó el Óscar a la mejor película extranjera en 1982.

Para él no es sencillo ser guiado sobre el escenario, ser sentado y comenzar, dijo sobre Brandauer, antes de la presentación, el director alemán Peter Stein, quien figura entre los más aclamados en el arte escénico y por apostar por el teatro clásico en forma armoniosa, pero con una puesta en escena fuerte.

La apertura oficial del Festival de Salzburgo se realizó el lunes por la mañana, con un discurso del director de orquesta argentino-israelí Daniel Barenboim, quien apeló a la paz. Todos, desde el presidente (iraní Mahmud) Ahmadineyad al presidente (estadunidense Barack) Obama hablan hoy día de la paz, pero por qué estamos tan lejos de lograrla, preguntó.

Ópera, teatro y conciertos

El prestigiado festival se realiza este año con el lema Donde se enfrentan Dios y el hombre, surge la tragedia. Hasta el 30 de agosto se realizarán unas 200 presentaciones de ópera, teatro, conciertos y lecturas.

Durante su alocución, Barenboim pidió a los involucrados en el conflicto de Medio Oriente que logren un acercamiento y dijo que el festival, dado que fue creado para promover la paz tras la Primera Guerra Mundial, tiene como propósito ser un foro para abordar ese tipo de problemas.

Las presentaciones del encuentro cultural comenzaron el domingo pasado con la obra teatral Cada cual, de Hugo von Hofmannsthal, centrada en el misterio alrededor de la muerte de un hombre rico y protagonizada por Nicholas Ofczarek y Birgit Minichmayr.

En total, hasta finales de agosto se presentarán siete óperas, 10 obras de teatro y numerosos conciertos. Se trata de los últimos festivales bajo la dirección artística de Jürgen Flimm, quien pasará a dirigir la Ópera Unter den Linden en Berlín.

Al igual que la obra Edipo en Colono, con Klaus Maria Brandauer, otras presentaciones relevantes serán el estreno del musical Dionisio, del compositor alemán Wolfgang Rihm, y la ópera Lulu, con Patricia Petibon en el papel principal.