Si este sábado le toca marcar al santista Felipe Baloy, Marco Antonio Palacios lo hará con todo, porque es su estilo en cualquier partido, pero aseguró no tener ningún problema con el panameño aunque lo haya acusado por insultos racistas.

“Hasta ahora Memo Vázquez no me ha indicado marca personal sobre alguien en especial, pero si me toca él, yo en un partido voy al 100. Desde que debuté entro muy fuerte y este sábado no será la excepción, pero hasta ahora no he lastimado a nadie”, explicó el Pikolín.

Al zaguero de Pumas le molestó que después del juego del pasado 9 de mayo, cuando Santos perdió 0-1 en el estadio Olímpico Universitario, Baloy revelara cosas que para él son parte del futbol y lo que pasa en la cancha se queda ahí.

Sin embargo, ahora considera que ese incidente ya es cosa del pasado y no negaría el saludo al delantero, porque no estoy peleado con él ni con nadie, somos compañeros de profesión.

Tras la práctica en la cancha dos de CU, Palacios opinó que se exageró en el caso, pues aseguró que ni él ni Darío Verón son racistas, y prueba de eso es que no recibieron castigo del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), y en cambio fijaron su compromiso para participar en una campaña por la tolerancia.

Siempre trato de sacar cosas positivas de lo que me pasa y algo de eso es que conocí el Conapred. Ya trabajé allí y voy a seguir porque hay proyectos. Hice un espot que se transmitió el domingo y estoy muy contento de apoyar la no discriminación, dijo el Pikolín.

En tanto, el mediocampista Óscar Rojas, quien ocupa el lugar que dejó Pablo Barrera, también asistió al encuentro con los medios. Se dijo contento por la oportunidad que le da el técnico, sobre todo porque no le pide ser igual al ahora jugador del West Ham, sino que haga las cosas que puedo hacer.