El primer selectivo de atletismo avalado por el Comité Paralímpico Internacional registró el récord mundial de lanzamiento de bala sobre silla de ruedas, impuesto por María de Los Ángeles Ortiz con 11.18 metros, y el regreso a las pistas de Saúl Mendoza, quien se ha concentrado en el circuito estadunidense de maratón.

En esta prueba planea participar en sus séptimos Juegos Paralímpicos en Londres 2012, además de los 10 mil metros, en los que ayer se impuso otro medallista mundial y olímpico: Aarón Gordián.

En la apertura de la competencia en el Centro de Alto Rendimiento (Cenar), Gordián concretó el primero de sus objetivos, pues al ganar con 21.27.46 minutos se clasificó al Mundial de Nueva Zelanda, a realizarse en enero. La marca mínima era de 21.30 minutos, por lo que Martín Velasco lo secundo, con 21.27.56.

Saúl Mendoza, tercero en la medición, se sintió sofocado hacia la mitad de la prueba por la altitud de esta ciudad, explicaría el atleta que reside en Texas, por lo que bajó el ritmo y terminó con tiempo de 22.35.15.

Sin embargo, no le inquieta, pues se mostró convencido de que el IPC (por sus siglas en inglés) deberá de reconsiderar los tiempos mínimos debido a las circunstancias de varios países, pues las marcas son inaccesibles aun para muchos competidores de elite.

Desde hace dos años no rodaba en una pista, vine a hacer presencia, pero no me preocupa el tiempo, porque existen otras competencias para buscar la marca, expresó Mendoza, quien se ha hecho un profesional del maratón desde su residencia, actividad que combina con la de motivador empresarial.

Gordián, Premio Nacional de Deportes 2009, se impuso a paso de rayo, aún lesionado en el hombro izquierdo y al mando de la tricicleta que tuvo tiempo de reparar, luego de que el sábado anterior, durante el entrenamiento en el autódromo Hermanos Rodríguez, lo embistió un grupo de ciclistas de Protección Civil que ensayaba para un desfile.