Martes 10 de agosto de 2010, p. a15
Akron/Francfort. Tiger Woods está en el peor momento de sus 14 años de carrera profesional. Pudo evitar la caída del trono como número uno porque su rival, Phil Mickelson, fue clemente, pero el final de la actual era de la superestrella estadunidense del golf parece próximo. En el torneo de Akron, el propio Woods inició el desmontaje de su propio reinado, precisamente en una competición en la que posee el récord del campo y donde había ganado en siete ocasiones desde 1999. Su última vuelta de 77 golpes (cinco sobre el par), su tarjeta completa de 298 impactos y su penúltimo puesto entre 80 participantes fueron los peores resultados de toda su brillante carrera. En 11 presencias previas en Akron, nunca había acabado por debajo del quinto lugar. Ni siquiera como amateur había jugado Woods tan mal como lo hizo en su campo preferido.