La Policía Federal (PF) analiza la situación de 25 de los más de 200 agentes que participaron en actos de insubordinación el sábado anterior en Ciudad Juárez.

Fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal revelaron que altos mandos de la dependencia investigan la trayectoria de al menos 25 agentes con el fin de ponerlos a disposición del Ministerio Público Federal (MPF) para que se determine si pudieran tener vínculos con algún grupo criminal y por eso alentaron la protesta del pasado sábado en aquella ciudad.

A cuatro días de ocurrida la insubordinación de agentes, ayer por la noche la Procuraduría General de la República (PGR) informó: en relación con los acontecimientos de Ciudad Juárez, Chihuahua, el Ministerio Público Federal investiga posibles conductas delictivas de mandos y personal operativo de la Policía Federal, a efecto de deslindar responsabilidades de cada uno de ellos. Cabe señalar que los mandos y otros elementos ya declararon ante la representación social de la Federación.

De acuerdo con fuentes de la PGR, el MPF adscrito al centro de mando de la PF es el que tiene conocimiento del caso, y ningún agente involucrados está detenido.

El pasado 7 de agosto, un grupo de policías enviados a Ciudad Juárez como parte de la estrategia contra el crimen organizado denunció que cuatro de sus jefes los habían obligado a realizar actos ilícitos, como extorsionar a los habitantes de ese municipio, donde se han pepetrado más de mil 700 ejecuciones este año.

La protesta de los policías federales en demanda de atención a sus quejas y solución a los problemas de extorsión que vivían ellos mismos, ya que tenían que pagar hasta por tener cargadores y cartuchos para realizar sus tareas de vigilancia, derivó en la retención de sus mandos.

Una vez disuelta la protesta, Rafael Avilés, jefe de las fuerzas federales de la PF, declaró que como resultado de las indagatorias realizadas se identificó a un grupo de personas instigadoras de las agresiones contra los cuatro mandos destituidos y que se estaban recopilando las pruebas necesarias para proceder contra quien resulte responsable.

Sin embargo, los mandos de la PF –que dirige el comisionado Facundo Rosas–, no imputaron delito alguno a los comandantes.

La SSP federal mantiene su posición de que los agentes insubordinados incurrieron en actos que pueden ser sancionados penal y administrativamente.