Los Ángeles, 27 de agosto. Su cine atrae y por eso Robert Rodriguez ha vuelto a la carga con Machete, película con sello inconfundible. Rodriguez ha respondido a su público con otra cinta cargada de sangre, violencia e hipérboles que verá la luz el próximo 3 de septiembre en Estados Unidos.

Vista fotograma a fotograma, una cinta de este estilo no pasaría una sola prueba de la crítica más exigente, pero tratándose de una película de acción con la firma de Rodriguez –maestro de las cintas gore y del homenaje permanente a los largometrajes de serie B– las cosas cambian. Machete es uno de sus trabajos más ambiciosos, envuelto la polémica acerca de la reforma migratoria y el debate acerca de la ley Arizona, por estar situado entre México y Estados Unidos, con el inolvidable Danny Trejo en el papel protagónico.

Sin embargo, tanto Trejo como el propio Rodriguez prefirieron evitar el tema, así como polemizar. Ha sido una coincidencia en realidad, y justo llega (la película) en pleno debate acerca de la migración. Pero no se toma las cosas demasiado en serio ni pretende politizar. A veces la realidad es más extraña que la propia ficción, asegura Rodriguez, que ya trabajó con Trejo en películas como Desperado, Spy Kids y Once Upon a time in Mexico.

Reparto de lujo

El entendimiento entre ambos fue total con una cinta que surgió de un trailer y que ya tiene previstas la segunda parte (Machete Kills) e incluso la tercera (Machete Kills Again). Si la gente lo pide, habrá que hacerlas, aseguró el director con entusiasmo.

Será la continuación de una cinta peculiar con un reparto de lujo en acción. Cuenta con veteranos excepcionales como Robert de Niro, en el papel de un senador republicano obsesionado con acabar con los migrantes en su querido estado de Texas; Don Johnson, una especie de líder cazaindocumentados en la frontera, y Steven Seagal, el malísimo de la película y principal obstáculo para que Machete, el gran héroe mexicano, ayude a sus compatriotas a hacer bueno el sueño americano.

Machete, interpretado por un Trejo que acaba de cumplir 66 años pero que demuestra estar en plena forma, anda detrás del hombre que mató a su mujer y a su hija a sangre fría. En el camino se topa con dos mujeres de bandera: Michelle Rodriguez, que interpreta a la heroína de los mexicanos, y a Jessica Alba, una agente de migración que termina por aliarse con sus compatriotas.

Además, participa la versátil Lindsay Lohan, que de alguna forma se interpreta a sí misma en el papel de una joven consentida por su padre y posee un talento especial para la fiesta y los hombres.

Todos esos elementos los aprovecha Rodriguez a la perfección para filmar una cinta grotesca por momentos pero con altas dosis de sentido del ridículo y de parodia de la violencia a ultranza en la frontera. También hay sexo, romance, giros sorprendentes –un cura que mata a diestra y siniestra– y mucha sangre y tripas colgantes. Casi todo a punta de machete, en un homenaje al enorme cuchillo que siempre lleva encima el carismático Trejo.

“Normalmente haces un trailer cuando ya has hecho la película”, explica el protagonista, “pero con esta fue al revés. Robert me ha estado entrenando para esta cinta desde que hicimos Desperado; eso fue hace 14 años”.

Sobre el primer papel protagónico a su edad, Trejo dijo que “es un tanto diferente porque aquí estás todos los días en el set y te tienes que dar cuenta que es tú película, y eso cambia un tanto las cosas; sin embargo, me lo pasé muy bien haciéndola”.